La "Orejona" tendrá nuevo dueño hoy. FOTO: AP Kylian Mbappé dice estar muy tranquilo antes de la Final entre Bayern y PSG, pero tiene claro que desea hacer historia para su país. FOTO: AP Flick podría salir con el mismo 11 titular que viene manejando en Lisboa. FOTO: EFE

Luego de una suspensión sin precedentes de la competencia, cambios forzados por la pandemia y mudar a otra sede la Final, la Champions League concluye hoy, 425 días después de que se jugó el primer partido.

O Paris Saint-Germain se lleva la "Orejona" por primera vez en su historia o Bayern Múnich lo hará por sexta ocasión.

El Estadio da Luz, en Lisboa, Portugal, en lugar de Estambul, es el lugar donde apenas unos pocos centenares de personas, incluyendo a los jugadores y árbitros, podrán estar presentes en la Final.

Nunca antes se ha disputado una copa europea en un ambiente tan vacío.

Ausentes están las usuales congregaciones de decenas de miles de hinchas en a ciudad anfitriona. Solamente el gran trofeo en Rossio, la principal plaza de Lisboa, indica que el mayor partido del futbol de clubes en el mundo se celebra en la capital portuguesa.

La alta de atmósfera en la Final 75 del máximo trofeo europeo de clubes no restará importancia a la magnitud de la ocasión para los dos equipos.

Por primera vez desde 1998, la Final es un duelo entre dos equipos que se clasificaron como campeones de sus ligas.