Ayer volvió la Champions League y dejó definidos a dos cuarto-finalistas más.
En Manchester, el City de Pep Guardiola fue claramente superior al Real Madrid -como ya lo había sido en aquel lejano partido de ida-, aprovechó dos garrafales errores de Varane y le repitió la dosis de 2-1 a la escuadra merengue, que otra vez se quedó muy corta para reflejar la diferencia en el juego desplegado por ambos equipos.
Al mismo tiempo, pero en Turín, sin ofrecer mucho el Olympique francés rescató un marcador global de 2-2 que le permitió avanzar por el criterio de desempate del gol de visitante, ante la Juve, una "Signora" envejecida, a la que ni siquiera la indeclinable mentalidad ganadora de Cristiano Ronaldo pudo salvar.
Ahora, queda por verse cómo se escribe en cancha catalana el segundo capítulo entre el Barcelona y el Napoli, que en el primero empataron a uno en cancha napolitana.
Y queda por verse, también, cómo concluye en cancha muniquesa el duelo que en la londinense quedó prácticamente definido desde el 25 de febrero, con el triunfo a domicilio, 3-0, del Bayern Múnich sobre el Chelsea.
Es decir, que hoy quedarán apuntados (aunque en realidad uno de ellos ya lo esté) los dos equipos que completarán a los OCHO que en unos cuantos días se irán a tierra portuguesa con la pretensión de jugar allá más de un partido, de preferencia tres.
Con el especial atractivo que implican esos enfrentamientos a un solo partido y en cancha neutral, los Cuartos de Final serán desahogados en cuatro días: Este miércoles 12 de agosto el Paris Saint Germain contra el Atalanta; el jueves 13, el Atlético de Madrid contra el Leipzig; el viernes 14, el duelo entre los dos equipos que hoy avancen (¿Bayern y Barsa?), y el sábado 15 el Manchester City contra el Olympique de Lyon.
Unos días después se jugarán las Semifinales, el martes 18 y el miércoles 19 (¿PSG vs. Atlético de Madrid, y Bayern Múnich vs. Manchester City?), para dirimir cuáles serán los dos equipos que jugarán la Gran Final el domingo 23.
Una inusitada edición de la Champions League que entre los cuarto-finalistas parece exhibir (por lo menos en teoría) un equilibrio de fuerzas que a tal grado no se había presentado en muchos años.
Y mientras entra en su fase de desenlace el torneo de más elevado nivel futbolístico en el mundo, acá en los mexicanos lares sigue su curso el incipiente "Guardianes 2020", apenas en esta tercera jornada que inició el jueves y mañana concluye.
Una tercera jornada que muy pronto volvió a dejar constancia de la endémica irregularidad en el desempeño de los equipos, con un América -por poner sólo un ejemplo- que después de haberse distinguido como el mejor de todos en las dos primeras jornadas, ayer se vio como un equipo del montón, común y corriente.
Esa inquietante inconsistencia, entre otras cosas, es lo que mantiene al torneo mexicano tan alejado del más elevado de todos, el de la Champions League, en donde a partir de los Octavos de Final cada equipo parece garantizar en cada partido un mínimo de rendimiento; sólo por comparar a los dos torneos que en términos generales mayor expectación provocan entre los aficionados mexicanos.
Y ustedes, estimados lectores... ¿cuál prefieren?
Twitter: @rgomezjunco |