Los Titanes han estado en el ojo del huracán por sus contagios. FOTO: AP

La NFL advirtió a los Titanes que sus jugadores no podían reunirse para ninguna actividad en persona ni en las instalaciones del equipo ni en otras partes, un día después de que varios de los jugadores entrenasen en una escuela privada, dijo el jueves a The Associated Press una persona al tanto de la situación.

Este jueves el equipo informó en redes que tiene dos casos más de coronavirus. Ya son más de 20 los contagios acumulados.

La NFL cerró las instalaciones de Tennessee y Minnesota el 29 de septiembre luego de ocho resultados positivos de pruebas de coronavirus para los Titanes. Un grupo de jugadores de Tennessee, incluyendo el quarterback Ryan Tannehill, se entrenaron en la escuela Montgomery Bell Academy en Nashville el 30 de septiembre tras recibir el permiso de entrenadores en la escuela.

No existe nada en el contrato colectivo ni en los protocolos para el Covid-19 que se refiera a entrenarse tras instrucciones de no hacerlo o en caso de un brote en una instalación del equipo.

El brote en los Titanes aumentó a 23 el jueves con un nuevo positivo, al tiempo que un resultado no concluyente de una prueba el miércoles fue confirmado como positivo. La instalación de los Titanes permanece cerrada y el equipo aún tiene prohibidas todas las actividades en persona.

Eso pone en dudas el partido del domingo contra Búfalo. Los Bills tienen programado enfrentarse con Kansas City el 15 de octubre. Una posibilidad que la NFL ha estado ponderando es reprogramar el partido Bills-Titanes al lunes o el martes por la noche, el Jefes-Bills al fin de semana próximo y no realizar un partido el jueves por la noche.

Los Titanes han tenido 21 pruebas positivas del virus desde el 29 de septiembre, con al menos uno en ocho de los últimos 10 días, incluyendo los últimos resultados, de acuerdo con la persona, que habló con la AP a condición de preservar el anonimato porque ni la NFL ni Tennessee habían anunciado los últimos resultados de pruebas.

La NFL ya aplazó y reprogramó el partido de los Titanes con Pittsburgh, del 4 de octubre al 25 de octubre.