Ligas amateur han tomado medidas ante los hechos de violencia. FOTO: Alejandro Garza En la página de Facebook de la Liga Azul 7 compartieron su consternación con el caso del árbitro fallecido. FOTO: Tomada de Facebook

El futbol amateur en Nuevo León ha sido duramente golpeado por la violencia.

Este mes se registró una pelea entre dos jóvenes durante un partido y presuntamente uno de ellos le pidió a su escolta que sacara una pistola, en el Colegio Labastida, el 9 de febrero.

Siete días después, en Guadalupe, el árbitro Juan José Hernández Vargas, de 61 años, falleció a causa del golpe que sufrió en la cabeza por un jugador que lo agredió durante un partido en la Liga Azul 7.

En el más reciente caso, en la liga de Kalcho Fundidora, un hombre fue golpeado en la cabeza con un barrote por un integrante del equipo contrario, quien según fuentes cercanas a la investigación está prófugo.

Ante los hechos violentos, presidentes y coordinadores de los torneos más importantes del Estado se pronunciaron al respecto.

"Nunca nos había pasado esto. Estamos muy preocupados, la gente que antes era muy tranquila ahora se volvió descontrolada, lo que pasó nos tiene muy afligidos", dijo Jesús Sandoval, coordinador de Kalcho Fundidora.

"Después de todo el pesar que estamos teniendo, tenemos una iniciativa todas las Ligas para juntarnos, queremos unificar todas las Ligas.

Queremos controlar eso. A partir de ya estamos recopilando las credenciales de votar de todos los jugadores, de los capitanes y responsables de los equipos, y los que no tengan vamos a pedirle otra identificación".

En la Liga Popular de Escobedo la mejor manera de fomentar la disciplina es siendo riguroso con los reglamentos e incluso han ayudado a policías de esa zona a dar con jugadores que han cometido un delito.

En la pared de la oficina del coordinador Carlos Medina, en Escobedo, se exhibe a los jugadores expulsados de por vida por agresiones.

"Aquí se viene a jugar futbol, así que tienes que tener un reglamento muy duro. No vamos a esperar (a que pase algo grave), se boletina. No permitimos que insulten (a los árbitros)", comentó Medina. "Después de lo sucedido tuvimos un junta con jugadores, muchos se lamentaron eso".

Gerardo Guerra Lozano, presidente de Liga Casabella, de San Nicolás, rechazó esta ola negativa e invitó a fomentar una cultura de paz en todas los torneos amateur.

"Todo lo que se está viviendo extrafutbol es algo totalmente reprobable. Ganes o pierdas, los equipos se equivocan, los árbitros se van a equivocar, pero eso no le da derecho a ningún jugador de ir a golpear", dijo.

"Hacer conciencia a los jugadores que van a una cancha a jugar, y si no juegas, hay reglamentos en los cuales te vas a regir".

En la Liga Casabella, una de las mejor organizadas, tienen un sistema de credencialización y una base de datos de los 3 mil jugadores registrados.

Aquí las sanciones se califican de primer a quinto grado, donde la suspensión más grave es que un jugador violento sea suspendido de manera definitiva.

En Kalcho Cumbres y Fundidora redoblaron la seguridad y renovaron fotos de cada jugador.