Está bien, aceptemos que gritar "Puto" en un estadio, más allá de las connotaciones y diversos significados, está prohibido. Entendido. Es incorrecto y no debemos hacerlo ni promover que se grite esa palabrota.

En la Jornada 4, Atlas fue el primer equipo sancionado con un partido de veto para el Estadio Jalisco, a raíz de los repetitivos gritos que se escucharon en el encuentro de la Jornada 2 ante Puebla.

En esta misma Jornada 4, tuve la oportunidad de asistir al encuentro Pachuca vs. Tigres en el Estadio Hidalgo. Durante el segundo tiempo, detrás de la portería de Nahuel Guzmán (Tigres), la numerosa porra de los Tuzos comenzó a gritar un viejo párrafo sudamericano, que conocí hace por lo menos 25 años en los distintos estadios de México y que ahora, con toda esta campaña en contra de la palabra "puto", he traído a colación en diferentes oportunidades y espacios: "Que lo vengan a ver, qué lo vengan a ver, ese no es un portero, es una puta de cabaret".

Ya que aseguran, el grito: "puto" (me resisto a llamarle homofóbico) ofende a los arqueros, los discrimina e insulta, cabe aquí notificar que el párrafo repetido una y otra vez desde la porra del Pachuca es mucho más ofensivo para un arquero, que la palabra "puto".

Comenté lo que escuchaba con mis compañeros en Pachuca, una vez que reparé lo que se entonaba, y para mi sorpresa ninguno se había percatado. Cuestioné si les parecía ofensivo y todos ellos estuvieron de acuerdo que se trata de un cántico mucho más ofensivo que el simple: "puto".

A partir de la Jornada 15 del Apertura 2019 (25 de octubre) la Liga MX implementó un protocolo para erradicar el grito de "puto", con los siguientes pasos:
 
1.- En la primera manifestación, el sonido local y la pantalla del estadio harán una invitación para que no vuelva a suceder.

2.- El árbitro detendrá el partido 2 minutos al repetirse y las autoridades retiran a los responsables del estadio.

3.- El árbitro pedirá a los jugadores que se dirijan a los vestidores por espacio de 5 minutos, antes de reanudar el juego.

4.- Si se repite, el árbitro y el Comisario reportarán por escrito lo sucedido, y la Comisión Disciplinaria determinará la sanción que corresponde al Club.

Desde octubre pasado las miradas y los oídos han estado muy pendientes de la palabra "puto" en los estadios, tan es así que el técnico del América, Miguel Herrera, tuvo que pagar una suspensión de 2 partidos extras, tras pronunciarla en zona mixta, al referirse al árbitro Marco Antonio Ortiz, luego del América vs. Cruz Azul en octubre pasado.

Tanto énfasis se ha hecho en la palabra "puto", que incluso dejamos de escuchar expresiones mucho más ofensivas, homofóbicas y discriminatorias en las diferentes tribunas, que de plano pasamos por alto.

Nadie en el Estadio Hidalgo siquiera reaccionó al escuchar: "Que lo vengan a ver, que lo vengan a ver, ese no es un portero, es una puta de cabaret"... y mucho menos el supuestamente agraviado Nahuel Guzmán. La paranoia sobre el grito de "puto" ha llegado a tal grado, que hemos dejado de escuchar lo verdaderamente ofensivo, solo por no contener la palabra señalada.

 
Twitter: @FELIXATLANTE12