• El 'Fideo' tiene una nueva cita con Lisboa. FOTO: Especial

El Paris Saint-Germain tiene un "Ángel" que quiere volver a tocar el cielo en Lisboa.

El romance de Di María con la capital de Portugal comenzó en el 2007, cuando el argentino dejó al Rosario Central de su país para dar el salto a Europa, fichando con el Benfica de la Primeira Liga.

El "Fideo" tuvo una destacada participación en su paso por las Águilas, y tres temporadas le fueron suficientes para llamar la atención de los "peces gordos" del Viejo Continente.

Con el Benfica ganó la Liga en la temporada 2009-10, así como dos título de Copa de Liga, en 2008-09 y 2009-10.

Para la campaña 2010-2011, Di María aterrizó en el Real Madrid como un jugador que podría ser una opción más en la ofensiva, sin embargo, su calidad le fue abriendo un lugar titular en la alineación merengue.

Para el 2014, se dio el gran reencuentro entre Lisboa y el nacido en Rosario, en el cual las cenizas volvieron a encender la llama y el nuevo flechazo se dio en el marco de la Final de la Champions, cuando el conjunto blanco se enfrentó al Atlético de Madrid.

Di María volvió al estadio Da Luz, el cual fue su casa en su paso por el Benfica, y lo hizo para comandar la consecusión de la décima "Orejona" en la historia del Real Madrid, llevándose incluso el premio como Mejor Jugador del Partido, por encima de estrellas como Cristiano Ronaldo, Karim Benzema o Gareth Bale.

Pero el futbol es caprichoso y hay amores que no se olvidan, por ello el "Fideo" ya reservó una nueva cita para volver a Lisboa y al estadio Da Luz, aunque ahora lo hará defendiendo la playera del PSG.

"Cuando cambiaron la sede a Lisboa, tuve una sensación extraña en mi cuerpo que me recordó cuando viví aquí tres años y lo feliz que fui en Lisboa. Ganar ese décimo título con el Madrid fue algo increíble. Ganar un primer título con el PSG sería inolvidable", confió.

El conjunto francés disputa mañana ante el Bayern Múnich el título de la Champions League, el cual nunca ha podido ganar en su historia, y por ello se encomienda a un "Ángel" que tiene un idilio con Lisboa.