El futbol mexicano ha admirado la elegancia del toque de Benjamín Galindo. FOTO: Archivo

El futbol mexicano ha admirado la elegancia de Benjamín Galindo para tocar el balón. Aún después de haberse retirado en el 2001; "El Maestro" ha dado cátedra en los entrenamientos al practicar el tiro libre directo ya en su etapa como técnico o auxiliar. Pero, ¿quién o quiénes influyeron en pulir un golpeo de balón tan fino?

Carlos Reinoso se atribuye tal mérito en la época que lo dirigió en Tampico Madero de 1985 a 1986, pero Galindo lo ha negado.

"Él dice muchas cosas, pero yo tuve varios técnicos antes que él que me enseñaron mucho como Héctor Hugo Eugui y Roberto Matosas", ha dicho Galindo en diversas entrevistas.

El oriundo de Tierra Blanca, Zacatecas siempre ha confesado que el Atlas fue el equipo de su infancia, porque ahí militaba Pepe Delgado, otro de los futbolistas mexicanos que era dueño de una técnica depurada envidiable, por lo que ahí tuvo ahí su primera influencia, un modelo a seguir.

Desde su debut, en la temporada 1979-80 con el Tampico (posteriormente Tampico Madero), destacó por encima de sus compañeros. Lo que ha comentado Galindo es que los técnicos uruguayos Roberto Matosas, y después Héctor Hugo Eugui, quienes dirigieron al equipo tamaulipeco en el inicio de la década de los 80, estuvieron muy cerca de él al darse cuenta de sus cualidades y le mostraban la mejor manera de pegarle al esférico para darle un buen efecto, tomando en cuenta que en el zacatecano ya había un talento natural al que solo había que pulir a través de la práctica constante.

Y cierto, al llegar el chileno Carlos Reinoso al Tampico Madero para tomar el mando del equipo en los Torneos Prode 85 y México 86, en los que el equipo se clasificó en dos ocasiones consecutivas a la Final por el título de Liga, fue cuando más lució Galindo.

Reinoso, quien en sus años dorados con América también era un especialista para tocar el balón; a través de su carrera como técnico ha sido un obsesivo de las jugadas de táctica fija, por lo cual Benjamín exhibió sus virtudes en la ejecución del tiro libre directo, penaltis, o asistencias para convertir a Sergio Lira en el goleador de la Jaiba Brava.

En su último torneo con Tampico, el México 86 en el que perdieron la Final con Monterrey, Galindo anotó 7 goles.

Efectivamente, los dos torneos proyectaron a Galindo para que Chivas fijará sus ojos en él y lo contratara para la temporada 1986-87 en donde Alberto Guerra recibió a un jugador en plena madurez futbolística y lo impulsó para ser la pieza clave del título de Liga 86-87.

El resto es historia, porque para entonces, ya pocos podían enseñarle a Benjamín Galindo cómo manejar el balón, y dejó de ser discípulo para convertirse en "El Maestro", como lo bautizó Rafael "Chango" Almaraz, quien durante más de 50 años fue la voz del Estadio Jalisco.

Por el momento, Benjamín Galindo, quien es auxiliar de Matías Almeyda en el San José Earthquakes de la MLS, sigue en recuperación en un hospital privado de Guadalajara, luego de la intervención quirúrgica a la que fue sometido el jueves pasado, a causa de un derrame cerebral.