Durante todos y cada uno de los años que llevas involucrado en el futbol de alto rendimiento, has escuchado lo siguiente: el futbol es una profesión muy corta. Lo escuchas como uno de esos lugares comunes, en los que se incluyen ciertas frases: "El futbol da muchas vueltas", "se vive como se juega" o "así es el futbol". Pero también con otras que te acompañan cotidianamente, tales como: "El que no chupa no rinde", "sácate el cocodrilo del bolsillo" o "disfruta el aquí y el ahora". Unas tan poderosas como las otras.
A todos ustedes les ha costado mucho, muchísimo trabajo, esfuerzo, dedicación y sacrificio llegar a ser parte de un plantel de Primera División. La competencia es cada vez más dura y la demanda mucho mayor que la oferta, sin importar el número de equipos existentes. Siempre habrá más aspirantes que oportunidades. En tu caso, no solamente fuiste merecedor de esa oportunidad, sino que en su momento la aprovechaste y superaste a otros aspirantes ... ¿Gracias a que alguien te observó? Sí, pero sobre todo gracias a ti, a tu talento, disciplina y disposición.
Nadie te preparó para dejar de ser uno más, nadie te dio cursos de celebridad, y mucho menos de control financiero para el momento de recibir más dinero del que podías administrar. No es tu culpa pero sí tu responsabilidad, porque al final de cuentas nadie te debería cuidar mejor que tu mismo.
En efecto, la carrera de futbolista es muy corta, no importa cuanto tiempo la desempeñes. Es cierto, las tentaciones son grandes, numerosas y constantes. Pero a diferencia de nosotros (los de otra generación), ustedes tienen testigos, observadores y curiosos apenas afuera de su casa. Hoy las posibilidades de salir ileso de una actividad prohibida por tu club se reducen demasiado como para tomar el riesgo. Eso debes saberlo tan bien como el número de followers que tienes en tus redes sociales.
Dicen que un verdadero profesional es aquel que da más de lo que recibe. Para llevar a cabo esta premisa, un futbolista debe ser extremadamente generoso en su entrega, en su cuidado, en su formalidad, en sus relaciones públicas y en el cuidado de su profesión.
Oribe Peralta, uno de los futbolistas más profesionales de los últimos años en la Liga Mexicana, dijo recientemente: "Te puedes equivocar una vez, dos veces, ya cuando lo haces tres, es que tienes un problema o no lo quieres entender".
Por supuesto que no es fácil ignorar a la popularidad y sus muy atractivos placeres y beneficios. Hay escudos y uniformes que te hacen guapo, hay automóviles que te hacen atractivo y hay profesiones que te impiden pasar inadvertido. Tu eres parte de una de ellas, y solo tu puedes decidir la manera en que desarrollas tu trabajo y si alargas o acortas tu estancia en ese maravilloso mundo que, algún día te darás cuenta, se llama plenitud.
El futbol es una profesión muy corta y si te detienes no te estancas, retrocedes. Ejemplos de talento desperdiciado y retiros prematuros tenemos por decenas a nuestro alrededor, todos ellos con arrepentimientos incluidos tarde o temprano. Cuida tu profesión, la más hermosa de las profesiones... porque nadie más la va a cuidar por ti.
Twitter: @FELIXATLANTE12 |