Los Acereros de Pittsburgh están teniendo su mejor inicio de campaña desde el 2010.
En aquel año, el equipo también ganó sus tres primeros duelos y concluyó la temporada con marca de 12-4 para terminar jugando el Super Bowl XLV que perdieron ante Green Bay.
Ahora, luego de vencer a Gigantes, Broncos y Texanos, la escuadra que dirige Mike Tomlin tiene marca perfecta de cara al mes de octubre, y parece tener los ingredientes suficientes para aspirar a uno de los siete boletos que se repartirán en la Conferencia Americana para jugar en los playoffs.
Ahora bien, más allá de que siempre es más sencillo hacer ajustes en medio de una racha ganadora, es importante señalar que Pittsburgh ha conseguido dos de tres triunfos jugando en casa, además de haberse enfrentado a tres equipos que por ahora, tienen marca combinada de 0-9.
Y, aunque los Acereros se han limitado a resolver, con algunos sobresaltos, el calendario que les tocó en suerte, me parece que habría que ser muy mesurados antes de echar las campanas al vuelo y colocar a este equipo al nivel de los pesos completos de la NFL.
Es innegable que Ben Roethlisberger ha ligado tres actuaciones sólidas en las que ya suma siete pases de anotación y solamente una intercepción. Su cuerpo de receptores y alas cerradas es un grupo que, sin tener a un jugador estelar, tiene talento de sobra, mientras que el ataque terrestre ha dado muestras de mejora en el primer mes del calendario. Aún así, la línea ofensiva ha sufrido por lesiones de algunos de sus jugadores importantes, y podría verse comprometida en su funcionamiento si alguna otra pieza clave llegara a faltar. Y aunque la defensa ha hecho el trabajo a la hora buena para cerrar los tres partidos, la secundaria está muy por debajo del nivel mostrado en 2019, y por momentos se vio claramente superada por el ataque aéreo de Nueva York, Denver y Houston.
Así las cosas, el mes de septiembre se ha ido, dejando muy buenas sensaciones en el entorno de los Acereros.
Sin embargo, habrá que ver a si la racha triunfal se mantiene una vez que se vean las caras ante rivales de mayor envergadura.
Por lo pronto, la visita a Tennessee para enfrentarse a Titanes será una prueba muy interesante para determinar si las ilusiones de una fanaticada sedienta de títulos están bien fundamentadas o si se trata de un espejismo generado por las bondades de su calendario que es uno de los menos complicados de toda la liga.
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