Ayer salió el primer finalista del actual torneo de la Copa MX... y hoy saldrá el otro.

Esta noche se juega un partido que puede valer la Copa entera.

Porque si tanto los entusiastas seguidores del Toluca como los del Querétaro estuvieron muy atentos al resultado del partido de ayer, en realidad es el otro duelo el que acapara la atención nacional, futboleramente hablado.

En la cancha del Estadio Azteca, el América y las Chivas irán en pos de un codiciado boleto rumbo a la Final de este torneo.

Un boleto especialmente valioso, porque no es lo mismo convertirse en finalista derrotando a cualquier equipo, que hacerlo a costillas del acérrimo adversario.

Si nos atuviéramos exclusivamente a lo que ambos equipos han jugado en las últimas siete jornadas, sin pensarle mucho señalaríamos al Guadalajara como lógico favorito.

Porque fue precisamente en aquel partido de la Jornada 7, hace dos meses, cuando las Chivas ofrecieron una brillante actuación y empezaron a dar un alentador salto de calidad en su desempeño, con un futbol refrescante, vistoso, rápido, solidario, eficiente.

Pero si pensáramos en el potencial que ambos equipos tienen, en el respectivo "techo futbolístico" que cada uno puede alcanzar, entonces emitir un pronóstico resultaría más arriesgado.

Además, sobre todo en el caso de las Chivas, los titulares de la Liga son unos... y los de la Copa otros.

Para el América y para el Guadalajara, esta noche estará en juego el prestigio, el orgullo, la posibilidad de instalarse en la Final de este torneo, y de fortalecerse de cara a la fase decisiva del otro, mucho más importante.

Sólo resta esperar que ambos entiendan cabalmente todo eso que estará en juego y sean capaces de jugar en consecuencia.

Y que por favor, si no es mucha molestia, se imponga el que verdaderamente mejor juegue.

 
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