"Me sentí muy inspirado esta semana"
 
Justin Rose, medalla de oro en Río 2016
 
 
Mientras los atletas mexicanos se encuentran tratando de ganar una medalla en los Juegos Olímpicos, en Río, aquí, en nuestro País, está la incansable disputa por ver quién se cuelga la medalla a la critica, a la sabiduría en deporte de alta competencia o a encontrar al culpable de tener, hasta ayer, sólo una medalla.

Cualquier opinión sobre estos temas es un punto de vista válido, pero merecen recibir una medalla. Yo sólo creo que aquella enseñanza que nos daban de pequeños en las competencias deportivas (lo importante no es ganar, sino competir) está incrustada en la cultura del deporte en nuestro País y, mientras no exista una visión institucional para el deporte de alta competencia, nadie se puede quejar de los resultados en Juegos Olímpicos o competencias de alto nivel.

Los atletas tienen sus propias metas, pero tan sólo estar en Brasil compitiendo es algo muy meritorio porque sólo van a los Juegos Olímpicos quienes están entre lo mejor del mundo en su deporte. A los atletas no se les debería molestar porque ellos se la rifan por el éxito propio en sus esfuerzos diarios y con lo que puede de recursos propios o externos.

Tampoco pienso sumarme a la lucha por las medallas entre mexicanos o hacer del árbol caído una fogata. Ni soy tan experto. Simplemente digo que deberíamos conocer abiertamente la postura de nuestras autoridades. Desde el Presidente de la República hasta los oficiales de la CODEME, el COI, y las Federaciones deberían declarar a dónde quieren llevar el deporte de alta competencia.

Una vez definido un rumbo claro, todo mundo sabrá qué esperar y, entonces, sí evaluaríamos los resultados. Los países con cultura deportiva hacen proyectos de largo plazo para alcanzar cambios importantes y los hacen públicos a sus ciudadanos.

Por lo pronto, el golf tuvo su reaparición con gran impacto y desenlace. Brasil es un país donde el golf pasaba desapercibido en el pasado y no tiene una población importante de golfistas. Para los Juegos Olímpicos se tuvo que construir el campo de golf porque no había uno adecuado para albergar la competencia, pero respondieron al hacer galerías que alcanzaron los 12 mil espectadores.

La lucha por las medallas fue similar a lo que se ve en un torneo "Major". Justin Rose, representando a Gran Bretaña, se llevó el oro al hacer 16 abajo del par y declaró que su medalla tiene tanto valor como el trofeo del Abierto de Estados Unidos.

El recién campeón del Abierto Británico, Henrik Stenson, ganó la medalla de plata, y Matt Kutchar, de Estados Unidos, fue bronce. El único mexicano en la prueba fue Rodolfo Cazaubón, quien terminó en el lugar 30 y tuvo las primeras y última rondas malas y en medio jugó muy bien.

Y ya que estamos hablando de medallas, yo creo que Gaby López regresara con una, toda su visión gira alrededor de su participación en los Juegos Olímpicos y todos los pasos para estar en Río los ha superado, pero lo más importante es que en los resultados del año ha ganado la confianza de saber que puede competir entre las mejores del mundo.

Hasta el próximo green.

 
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