En general, ha sido una buena actuación del equipo de clavados. Ellos siempre quieren ganar medalla, pero no debemos olvidar que compiten ante las 7 mejores parejas del mundo, y ya han demostrado que se les puede ganar.

Debo acotar algo. Estamos acostumbrados a verlos hacer clavados de 9, pero en Río han tenido algunas fallas que no se pueden negar.

En el caso de Iván García y de Germán Sánchez, me consta lo mucho que han entrenado, solo que las lesiones sí repercutieron. Es posible que no pudieron tener toda la carga de entrenamiento, y eso se refleja en la exactitud de sus clavados.

Con ellos el tema de la entrada al agua es grave, en sincronización no, por eso creo que quizá las lesiones fueron un factor que les afectó, que no llegaron con sus cuatro años de trabajo al 100 por ciento al tener que recuperarse de sus molestias y pausar sus entrenamientos.

En Paola y Alejandra vi ciertas fallas en sincronización. Entrenaron un año juntas, a diferencia del
ciclo pasado, se nota que van bien, pero entran con arco en la espalda y se ve un poco pasado el clavado. Eso las aleja de las medallas.

Hablando de Rommel y Jahir, me parece que su resultado no fue malo, fue muy difícil su competencia por la lluvia. No es excusa, pero todo se complica, por eso la FINA ya no quiere competencias al aire libre.

Con todo y que Jahir no pudo repetir el clavado, ellos ya estaban lejos del bronce, ya habían perdido muchos puntos. Ellos fallaron más en sincronización; fue evidente. No creo que, aunque lo repitieran, hubieran sido medallistas. Esa decisión fue totalmente del juez árbitro y hay que recordar que no hay repetición en ese deporte.

No siento que los jueces estén afectando a los mexicanos. Hay que reconocer ciertas fallas de nuestros clavadistas y que no han tenido los superclavados de otras ocasiones, solo que en Juegos Olímpicos el jueceo es mucho más exigente.



Jashia Luna, clavadista olímpica en Sydney 2000, Atenas 2004 (quinto lugar en plataforma sincronizados) y en Beijing 2008