Ah, qué las primas
 
Como les platiqué la semana pasada, unas primas causaron conflictos en la Selección Mexicana, que hizo un papelón contra Chile en la Copa América, y ahora resulta que en Chivas hubo bronca por otras.

Y claro que no me refiero a algunas muchachas, sino a los premios que se dan dentro del futbol, a los que parece que los futbolistas son adictos.

El problema fue muy similar porque en ambos casos existen futbolistas molestos porque les pagan menos que a sus compañeros.

¿No ganan suficiente como para andar regateando premios? Sí, evidentemente la respuesta es afirmativa, pero la lana es la lana y, como dicen los directivos cuando quieren castigarlos: "Hay que pegarles donde más les duele, en el bolsillo".

La historia no es nueva, desde tiempos de la Promotora existía una comisión integrada por los capitanes, entre los que estaba Oswaldo Sánchez, a los que se les pagaban unos dolaritos extra para que mantuvieran a raya a los demás y no la hicieran de tos.

En este caso, el conflicto se dio entre un banca que nunca rindió, como Michel Vázquez, y otro banca, pero con la diferencia que es capitán, como Omar Bravo.

Digo, me parece que el primero tendría que cuestionarse si su rendimiento le dio como para merecerse el sueldo, ya no digo el premio de 250 mil pesos que le tocó.

Mientras que el segundo tendrá que tener cuidado con su liderazgo porque ya más de uno de sus compañeros empiezan a cuestionar que se ponga siempre muy salsa como si fuera dueño del vestidor, pero ya le cuesta rendir en la cancha, sobre todo cuando se empieza a presionar él sólo, es decir, casi siempre.

No sé, pero creo con todo lo que está haciendo la directiva, más estos conflictos extra cancha, el arranque de torneo no pinta nada sencillo para Matías Almeyda y compañía.

 
Enemigo íntimo
 
Por mas que en el Atlas quieren hacer las cosas bien, un enemigo en casa los madruga.

En esta ocasión no hablo de refuerzos que, por cierto, todos los equipos les ganan a pesar de que algunos se creen los mejores del mundo, a lo que me refiero es a las filtraciones de sus camisetas.

Pobres Zorros, un año guardando sus modelos para que una de las tiendas en las que venden la marca que los patrocina las saque a la venta.

No es la primera ocasión que les ocurre y normalmente en esta época una tienda madruga al equipo, así que la ropa de juego ya no es la gran sorpresa, por lo que no pueden mostrarla con bombo y platillo, ni hacer todo el show de las redes sociales y demás.

Ahora no fue una tienda deportiva, sino una departamental gringa, muy famosa, de cinco letras, que tiene el mismo nombre que antes tenía una torre en Chicago.

La noticia no le cayó bien a la directiva y menos cuando se dio cuenta de que a muchos seguidores no les gustó la de local, porque es un refrito de una muy feíta que usaron en 2001.

De seguro que esto no lo sabia la gente de los Zorros, con esto de que hay muchas cosas de la institución que no conocen los nuevos directivos.

Así que no les auguro muchas ventas, pero ánimo Rojinegros, que la del centenario aún no se las han madrugado y podrán mantenerla en secreto, con la ventaja de que sólo van a venderla en una tienda de la marca patrocinadora y es edición limitada.

 
Nomás emocionan
 
Antes de que terminara la temporada surgieron rumores de que Paul Aguilar tenía ofertas de un club de Europa, incluso se dijo que el Porto estaba interesado en él, tomando en cuenta la relación que tiene con el América, con el que ya hizo negocio en dos ocasiones.

Finalmente el lateral azulcrema se quedó vestido y alborotado.

Ya ven que en eso de hacer sentir importantes y marear a los futbolistas con el tema de que los quiere un equipo europeo nadie le gana a los representantes, pero nada que apareció la oferta y menos después de la desastrosa actuación de Aguilar en el partido contra Chile, en la que los goles, y no del Tri, cayeron por racimos.

 
 
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