Señoras y señores, se va un grande del futbol, un técnico como pocos en el futbol de España y del mundo.

Vicente del Bosque ha cerrado un ciclo dorado con la Selección de España. Tomó el mando después de que Luis Aragonés ganó la Eurocopa de Austria y Suiza.

Aragonés fue artífice de ese magnífico equipo que ganó la Final 1-0 con gol de Torres. Tenía a Fábregas y al "Niño" adelante, a Xavi y a Senna en medio campo, y Ramos como lateral.

Aragonés dejó el puesto por edad y apareció Del Bosque para el Mundial 2010, con un cambio de jugadores, con las llegadas de Iniesta, Silva, Busquets y Xabi Alonso.

La alineación de 2010 mantenía a Casillas en la portería, Ramos como lateral y Piqué apareció con Puyol en la defensa. Busquets tuvo a Alonso como acompañante y adelante Iniesta, Pedro y Villa.

Del Bosque logró, en 2012, cuando ya nadie daba nada por España, ser trascendental con la incorporación de Alba, el gran momento de la dupla Busquets-Alonso y el factor Xavi, fundamental para las dos conquistas anteriores; pasará mucho tiempo para que aparezca un jugador de su categoría y capacidad.

Pero después viene la debacle en el Mundial 2014, cuando es goleada por Holanda, a pesar de que pudo ir ganando 2-0 en el primer tiempo.

A la Euro 2016 no llegó bien y perdió ante Italia, luego de 22 años de no hacerlo en un torneo oficial; le pasó por encima en el primer tiempo y, cuando quiso reaccionar, no hubo tiempo para igualar y perdió 2-0.

También uso la base de Piqué, Busquets, Iniesta y aparecieron otros, como Nolito, Morata y De Gea.

Del Bosque, el hombre al que le debe tanto el futbol español, ha dicho "no más" y se jubila. Le duele, entre otras, que no haya podido darle sitio a Casillas.

España estaba obligado a colarse hasta las Semifinales, sin embargo, Croacia la echó de la posición cómoda del grupo.

Además, no llegó en su mejor momento, como dijo Piqué, no llegó para ganar y Del Bosque no pudo dar el cambio entre jóvenes y veteranos como lo han hecho otras Selecciones, como Italia, Alemania, Inglaterra, Portugal o Bélgica.

Se va del Bosque, quien era un padre para los jugadores y siempre habló bien, fue ecuánime en victorias y derrotas, y cuando tenía problemas mandaba mensaje directo a sus jugadores para explicar las decisiones en momentos fundamentales, como con Casillas.

Del Bosque deja un listón alto, pues España pasó de ser un país con grandes triunfos a nivel de clubes a lograr victorias con la Selección.

Vendrá otro entrenador que, desafortunadamente, no será Luis Enrique o Guardiola. Tendrán que buscar dentro de España, con Lopetegui, Valverde, Jémez o Caparrós, capaces de aglutinar el futbol de España sin perder la filosofía que marcó Aragonés y siguió Del Bosque.

Adiós a una gran persona, ser humano y seleccionador.

 
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