Hoy se inscribirá el primer equipo en la Final... y mañana el otro.

En su majestuoso estadio, esta noche el Monterrey tratará de revertir la tendencia marcada en el suyo por el América.

Si aquel 1-0 del miércoles se quedó corto para plasmar la superioridad americanista en los primeros 90 minutos, en los que hoy se juegan la historia podría escribirse de manera muy distinta.

Para conseguir que esta segunda historia sea más alentadora para ellos, estarán obligados los anfitriones a funcionar mucho mejor que como huéspedes.

Sólo así podrá la escuadra regiomontana crear las condiciones propicias para obtener cualquiera de los resultados que necesita para avanzar: el 1-0 a favor o cualquier triunfo por dos o más goles.

Para el América, en cambio, bastaría cualquier victoria, cualquier empate o incluso cualquier derrota por un gol de diferencia, siempre y cuando no fuera de 1-0.

Si se antoja lógico suponer que esta noche el balón será del Monterrey, más arriesgado resultaría vaticinar de quién será el partido.

En teoría, tanto el América como el Pachuca están más cerca de la Final, cuyo encuentro definitivo se producirá el domingo 29.

¿El América con un 58-42 sobre el Monterrey, y el Pachuca con un 61-39 sobre el León?

Aunque más o menos eso digan las probabilidades y la teoría, falta saber lo que en la práctica opinen el Monterrey y el León... y con qué futbol sustentan sus opiniones.

Hoy y mañana lo sabremos, y sólo nos resta esperar que, por favor, se inscriban en los últimos dos juegos los dos equipos que mejor jueguen, los que más a tono estén con lo que debe ser el verdadero "juego de finalista".

A ver cuál lo juega hoy.

 
 
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