¿Le sobran, le faltan?
Si usted quiere asistir al Clásico Nacional en el rebautizado Estadio Chivas y no tiene chivabono, le tengo malas noticias.
Como siempre en estos casos los boletos estarán escasos y ahora más que nunca porque entre abonados de un torneo, de un año y los multianuales, dejan menos de medio estadio libre.
Ah, pero a eso hay que sumar los compromisos con patrocinadores y demás gorrones que suelen aparecer en estos partidos.
Si en el juego inaugural contra los Jaguares los boletos se agotaron muchas horas antes de arrancar el duelo, imaginen cuánto durarán en taquilla esas entradas.
Y por si fuera poco, váyase preparando para el clásico aumento, porque no crean que rondarán los 80 pesitos que costaron los baratos en el Guadalajara-Tijuana.
Eso si no nos salen con la novedad, como en otros juegos, de que en la taquilla vuelan en unas horas porque se vendieron por Internet.
Aún no se define cuándo empezarán la venta, pero les aviso que todo indica que lo hagan el lunes y puedo asegurarles que en 24 horas ya no habrá... en los lugares oficiales, porque ¿a poco creen que no habrá en la reventa?
Esos no fallan, a pesar de que quieren limitar los puntos de venta y no habría boletos en las tiendas de las plazas comerciales, solamente tendrían en el ex Omnilife y seguramente en la página web.
¿Será que habrá muchos americanistas que superen esas barreras para estar en el Clásico de la próxima semana?
Me parece que sí.
No es para tanto Fibras sensibles tocó Jaime Ordiales al hablar de las fallas en el servicio médico de las Chivas.
No cuestionó la capacidad de Rafael Ortega, ni yo tampoco me atrevería a hacerlo, pero me parece excelente que busquen apoyo en más gente para sacar a sus lesionados.
El doc, quien fue también presidente en su momento, no se da abasto con tanto paciente y cirugía que tiene cada semana, así que por simple matemática le queda poco tiempo para ver a los futbolistas rojiblancos.
Lo que es increíble es que alguien como Osvaldo Alanís no pueda estar listo o que los reportes médicos tarden días o semanas en aparecer.
Ahora que de eso a creer que ahí está el problema por el que el Guadalajara no gana, hay un mundo de diferencia.
Por cierto que, hablando de las razones de un fracaso más, ya noto un clamor en un sector de la gente para que Jorge Vergara abra la puerta a los extranjeros o al menos los naturalizados.
No se engañen, mis queridos chivas "openmind", no viene por ahí la solución, sé que la desesperación es canija, pero díganme si tener extranjeros le ha servido al Atlas, a los Dorados o el año pasado a la UdeG.
¿Que sería competir en igualdad de circunstancias? Sí, aunque de poco sirve si la "igualdad" de plantel es con el Puebla, el Tijuana o los tres ya mencionados. La cosa es que le metan la misma lana que los Tigres, el América, el Cruz Azul o el Monterrey.
El tema pasa por la calidad, no por la nacionalidad.
Adiós tortas Pues en el Atlas los jugadores ya le tienen que decir adiós a los desayunos de la vitamina T: tacos al vapor, tortas ahogadas o tamales, los que traen costumbres chilangas.
La gente de pantalón largo ya pone lupa al aspecto futbolístico con Gustavo Costas, el mental con Juan Rodríguez, el famoso maestro de coaching, y ahora quieren que los jugadores se alimenten bien, así que desde la semana pasada pusieron en marcha un plan de desayunos, mismos que hacen en las instalaciones de Las Palomas.
Y no, el entrenador no será el que pique la fruta o haga jugos, sino que se encargará de eso una señora bajo el estricto proceso del nutriólogo del club.
Esto lo vieron debido a que los jugadores muchas veces no se alimentan bien y luego no rinden en las prácticas.
Así que, una excusa menos.
Mail: san.cadilla@mural.com Twitter: @SanCadilla |