Se vale regarla
 
 
Por ahí me enteré de que algunos miembros del cuerpo arbitral del partido entre Pumas y Chivas, y no me refiero precisamente al juez central, como que se quedaron con cierta duda sobre si habría estado bien el penal que se marcó en la carga de Carlos Salcido sobre Matías Britos, a tal grado que, horas después, todavía andaban con un dejo de incertidumbre de que hubiera estado bien o mal, hasta que uno de los integrantes del área técnica les comentó que mejor ni se preocuparan de eso, que hay jugadas muy complejas de señalar, y que a veces nada más se distinguen bien a través de la repetición en la tele, así que no podría considerarse como una falla en el trabajo si acaso se pudiera poner a discusión.

Así que estos asistentes, que andaban con los nervios de que les pusieran calificaciones bajas a su trabajo, pues ya se desprendieron de sus inquietudes cuando les dijeron que eso sólo en la tele se podría apreciar bien.

Supe que hay tal convicción en la Comisión de Árbitros de que sólo a través de la repetición pueden detectarse ciertas jugadas, que en esos casos no se influye en la calificación de los árbitros para que puedan estar en la siguiente jornada y precisamente por eso fue que se fortaleció la idea de llevar a FIFA la petición del árbitro de video, para que una repetición ayude a marcar mejor a los que están dirigiendo el partido.

Por lo pronto, los errores en jugadas apretadas al parecer no serán objeto de cacería a los árbitros por parte de sus jefes.

Ojalá que esto no signifique vía libre para que se equivoquen todavía más.

 
 
 
 
Andamos 'armados'
 
 
Me contaron que los jugadores argentinos del Puebla, Cristian Campestrini y Matías Alustiza, pasaron un mal rato con la Policía Municipal de la Angelópolis, pues traían una pistola de juguete en el automóvil en el que viajaban, la cual pertenece al hijo mayor de "El Chavo".

Después de ser detenidos y de explicar a los agentes de la ley que el "arma" era sólo un juguete, los jugadores pudieron continuar su camino, no sin antes llevarse tremeeendo quemón en las redes sociales, donde las fotografías de ambos dialogando con las fuerzas del orden circularon la tarde de ayer.

Las bromas no faltaron. Uno que otro jocoso aseguró que la pistola la llevaban porque quedaron traumados por el asalto que vivieron el domingo ante Morelia en el Estadio Universitario de la BUAP, donde el árbitro Alfredo Peñaloza los atracó descaradamente con dos penales en contra.

 
 
san.cadilla@reforma.com