No es gripe
 
 
Si ustedes piensan que Ángel Reyna algún día iba a madurar, pues déjenme decirles que esa fecha no ha llegado.

El "Pleititos" no se va de las Chivas por haber hecho algo, sino por hacer muuuchas cosas y colmarle el plato no sólo a Chepo de la Torre, sino a todo el plantel.

No crean que va a regresar y el castigo es en realidad la puerta de salida que desde el Draft le habían buscado, porque al resto del equipo ayer le dejaron muy claro que Reyna está más afuera que Mariachi del Parián después de cantar El Rey 50 veces en un Día del Padre.

Bueno, desde el mercado de piernas de Cancún, Néstor de la Torre anduvo moviéndose de salón en salón para negociarlo, pero nadie se quiso echar el "costal de papas" al hombro y miren que el mayor de los De la Torre es capaz de venderle un Topaz 92 a una señora copetona de Puerta de Hierro.

En realidad, las actitudes que no gustaron del jugador nacido en el América fueron las caras de apatía que ponía en las indicaciones técnicas, su desigual empeño en los entrenamientos, la poca convivencia con los demás, el casi no juntarse con los que sí jugaban, el hacer más grupo con los canteranos, el sobredimensionar las lesiones, sus largas ausencias por rehabilitación, en fin, todo lo que un personaje de perfil más allá de lo introvertido que es y por lo que termina por ser catalogado por todos como alguien raro.

Ya sé que muchos se acordaron del "Bofo" Bautista, pero aquel por lo menos en la cancha marcó diferencia en varios partidos, alguno que otro memorable, como el de la goleada al Boca Juniors o el de la Final en Toluca, cosa que Reyna nunca alcanzó en sus 27 juegos en año y tres meses como rojiblanco.

Eso en lo futbolístico, porque en su vida privada tampoco le aceptaron que fuera muy disciplinado para las reuniones y asados en su casa algunos lunes de cada mes, rigor que no aplicaba igual la hora de jalar con el equipo.

¿Se acuerdan de Fredy Helfon? El amigo empresario de Jorge Vergara fue quien insistió en que comprara el "problema" para sus Chivas, ése que ya había padecido Víctor Vucetich, en el Monterrey; Jesús Martínez, en Tuzolandia, y que luego Fidel Kuri adoptó como hijo en Veracruz.

Hasta Rafael Puente del Río abonó para animar a los dueños para que compraran su pase.

El ahora político veracruzano le sacó a las Chivas hasta la risa con la transferencia hace año y medio, en algo superior a los 5 millones de dólares, por lo que ahora Vergara está dispuesto a que, en caso de que no se comprometa, negociarle una rescisión del contrato y ese salario de 1.7 millones de dólares anuales que cobra el angelito, con tal de que se mantenga lejos de las Chivas, en caso de que se niegue a entrenar con la Tercera.

No duden que dentro de un mes, el 19 de septiembre, cuando el jugador cumpla 31 años, pueda festejar en algún otro lugar.

¡Regalazo!

 
 
 
 
Uruguayo al Atlas
 
 
Dos buenas noticias recibió esta semana el Atlas. La primera es que no sólo ya no fue goleado y ganó; la otra, que está muy cerca de cerrar a su último refuerzo extranjero.

Al principio decían que no llevaban prisa, pero ante la falta de buenos resultados y que el equipo en un periodo de cinco días se comió ocho goles, pues las cosas cambiaron y se enfocaron en traerle un jugador más a Gustavo Matosas.

Se hablaba de un delantero y tenían prácticamente listo a Nicolás Blandi, pero la búsqueda cambió con tantos goles en la canasta.

En las próximas horas cerrarán al nuevo jugador, del cuál no prometí dar muchas pistas, pues acuérdense que luego se le cae a Heriberto Ramón Morales -el pase del jugador, no sean malpensados-.

Bueno, el chiste es que será un uruguayo. Nos leemos mañana.

 
 
 
 
Notihachazos
 
 
- El que sin duda demostró que tiene capacidad para estar en los banquillos es el español Pako Ayestarán, pues sus métodos europeos por poco logra el ascenso con los Estudiantes Tecos, a no ser por los penales que perdieron con los Leones Negros y luego de la renuncia de Pedro Caixinha ya lo nombraron como su nuevo técnico.


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