foto
Una buena idea
Guillermo Leal | 23-07-2015
en CANCHA
compartir por:
Desde hace un tiempo la necesidad de defender la permanencia de la fiesta brava se ha convertido en un ejercicio imperioso, ante los repetidos ataques -algunos de ellos infundados- de quienes, a veces, con una falsa bandera, desean acabar con un espectáculo que marca tradición y se ha convertido en una fuente de ingresos para miles de familias.

Hace unos días en la Plaza de Las Ventas de Madrid se llevó a cabo una reunión en la que se involucraron los profesionales del toreo, para tomar medidas y acortar algunos tiempos muertos en beneficio de un espectáculo fluido y rápido como deben ser actualmente las puestas en escena.

Y entre muchas que lógicamente son propias del ruedo madrileño, hay una que me parece una buena idea y que podemos adoptar en plazas mexicanas: la limitación del número de los descabellos y de la puntilla.

El descabello (suerte que se ejerce con una espada corta que a los 15 centímetros de la punta tiene una cruceta) y la puntilla se utilizan para acabar de un golpe con la vida del astado.

Cuando el descabello no se realiza adecuadamente, los toreros pasan fatigas para matar al toro convirtiéndose en un castigo innecesario que, desde luego a nosotros los taurinos tampoco nos gusta.

Con esa adecuación, se busca acabar con la posibilidad de ejecutar descabellos a destajo, lo mismo que la puntilla, suerte que allá en España realiza uno de los subalternos y no, como en México, un puntillero que es experto en ello y que normalmente ejecuta la suerte con atingencia, aunque a veces como todo ser humano, falle.

Creo que ha llegado el momento, inclusive, de proponer que los matadores tengan un número determinado de intentos para ejecutar la estocada y no se eternicen en pinchazos buscando matar al toro.

La estocada es la culminación de faena. No se puede desaparecer, pero sí adecuar. Mientras tanto, esperemos a ver la propuesta, posteriormente los resultados y la posibilidad de adaptarla en México.

 
 
 
DESCUBRIENDO...

 
Se anunció el inicio de la segunda etapa del certamen Descubriendo un Torero.

Un proyecto auspiciado por ganaderos y algunos empresarios, con el apoyo del resto de los estamentos taurinos.

Un total de 16 festejos darán oportunidad a 30 novilleros de mostrar sus cualidades y con el mismo formato de realizar los festejos en Zacatecas, Tlaquepaque, Arroyo y el Centenario de Torreón, para después las semifinales y las finales en la Plaza México, Guadalajara y la plaza San Marcos de Aguascalientes.

Casa Toreros anunció en Tlaquepaque el inicio del certamen con tres novilladas a partir del 1 de agosto y hasta el 15, un día antes de que el Nuevo Progreso inicie su temporada novilleril que se unirá a la Temporada Grande, y así los tapatíos tendrán fiesta brava hasta finales de noviembre.

 
 
guillermo.leal@reforma.com
 
Twitter: @memo_leal2009
 
 
 
 
 
 
 
compartir por:
Resumen Noticioso
¿Quieres recibir en tu e-mail la columna editorial de Guillermo Leal?
1 mes2 meses3 meses
Ultimas columnas
Va a Madrid
16-07-2015
Una feria con novedades
09-07-2015
Época novilleril
25-06-2015
La modernidad
18-06-2015
Difícil panorama
11-06-2015
Logran apoyo internacional
04-06-2015
Al final Adame, otra vez
21-05-2015
¿Y los mexicanos?..
15-05-2015
Señor Adame
30-04-2015
Otras columnas
San Cadilla
SAN CADILLA
Francisco Javier González
Victorias de dos sabores
Bonifacio Núñez Vega
Aberrante
Bonifacio Núñez Vega
Buen trabajo