En la oficina de objetos perdidos se presentó un aficionado preguntando si no tenían ahí el futbol de la Copa América porque nadie lo puede encontrar.

Para variar, el torneo sudamericano está entregando partidos en que el talento ocupa el 30 por ciento de lo ofrecido. La garra, las artimañas, el juego desleal y los puntapiés a los tobillos se pelean por el 70 restante sin que se haya decidido cabalmente con que parte se queda cada uno de ellos.

Dice José Pekerman que los jugadores de Colombia llegaron fatigados y que el físico no les da para más. A Chile le pasa lo mismo: Alexis Sánchez -el jugador diferente de los andinos- confesó al término del juego de ayer que las piernas no le respondían en el primer tiempo.

César Luis Menotti apunta que la falta de entrenamientos en las Selecciones participantes y el tener que competir cuando la familia de los futbolistas veranea en diferentes playas del mundo, da como resultado que no haya chispa en el torneo.

Si cualquier certamen empieza realmente en la segunda ronda porque ya se filtraron los equipos que tenían menos calidad -¡ouch!- , lo visto ayer en el fervoroso Estadio Nacional de Santiago nos adelanta que en las fases de eliminación directa las cosas no van a cambiar demasiado.

Alguna vez dijo Luis Aragonés que alguien le hizo un flaco favor a la Selección española cuando la bautizó como "La Furia Roja". Durante generaciones se apeló a eso, a la bravura del equipo que generalmente bufaba como toro pero no ganaba nada. Hasta que a alguien, el propio Aragonés, puso a jugar a futbolistas bajitos y talentosos que empezaron a ganar todo lo que se les pusiera enfrente.

Viene a tema porque a Uruguay le sigue haciendo daño eso de la "garra charrúa". Y le hace daño porque lo sigue ejerciendo. Reclama, patea, estorba, defiende y cuando puede, muerde y arrebata.

Una pena cuando tiene jugadores de gran talento pero que habitando en el cartabón de la garra, son superados por su propio personaje y dejan de utilizar muchas de sus virtudes. Si tan solo se decidieran a atacar un poco más.

Para el futbol es buena noticia que haya ganado Chile. No solamente porque anima un torneo azotado por las dudas financieras, sino porque trató más que el adversario, tiene siempre la intención de ganar -ver donde juegan sus laterales es una muestra de ello- y posee algo del poco futbol que nos ha entregado la Copa.

Ojalá que el video castigue a Gonzalo Jara por su bajeza frente a Cavani. Y que éste no hubiera jugado porque se confundió su solidaridad y heroísmo con la razonabilidad.

Total que por angas o mangas, escasea el buen juego. Difícil apostar por lo que viene.


fjgonzalez@reforma.com
Twitter: @fj_tdn