En el ámbito internacional, el América ya cumplió y los Tigres siguen siendo un digno representante del futbol mexicano.

Previo a lo que serán "Finales" para muchos en la Liga MX, el América conquistó el título de campeón de la Concacaf, alimentó su confianza y llega motivado al cierre del Clausura 2015, que pinta para ser interesantísimo.

El susto de otra vez estar abajo en el marcador frente al mal equipo del Impact de Montreal por momentos llevó al América a la desesperación, pero su mejor calidad se hizo presente en el segundo tiempo y el lógico pronóstico se cumplió. Sufrido, pero merecido.

Ahora, en la Liga, Matosas espera que la motivación adquirida supere el tremendo desgaste de un partido que fue mucho más físico que técnico.

Los Tigres apenas llegaron de Bolivia el miércoles, tienen este largo viaje sobre las espadas, pero en comparación con los americanistas cuentan con un punto más en la tabla general, un partido menos exigente frente a los bolivianos y un día más de descanso.

Al igual que las Águilas, los Tigres no dieron un buen primer tiempo, pero superaron los 2 mil 860 metros de altura y a su frágil adversario para prácticamente amarrar su calificación a los Cuartos de Final de la Copa Libertadores.

Si de motivación se trata, Tigres y América llevan la delantera en la lucha por llegar a la Liguilla, pero ¿y el físico apá?

Las cosas en la Liga MX están que arden y a tan solo dos jornadas del final de la fase regular no hay ningún equipo matemáticamente clasificado.

Este fin de semana viviremos partidos que serán decisivos para muchos y entre ellos están Chiapas y Monterrey que se juegan la vida.

Con buenos números y un mal funcionamiento colectivo, Tony Mohamed tratará de hacer la hazaña de romper una racha de tres años sin poder vencer a los chiapanecos.

Como visitante, el Monterrey sólo ha ganado en una ocasión y lo hizo jugando bien frente a un complicado rival como los Xolos. Si no repiten la dosis dirán adiós a la Liguilla y el fracaso será consumado.

Van contra unos Jaguares que no son los de antes, que en las últimas ocho jornadas han ganado más puntos como visitantes que como locales.

Curiosamente, su última victoria en tierras chiapanecas fue justamente frente a un equipo regio. Toco madera.

Siendo anfitriones no han vencido en sus últimos cuatro juegos: empataron tres y perdieron uno.

Creo que más que pensar en lo que trae u ofrece el equipo sureño, el futuro de los Rayados está a la orilla del abismo por lo que han hecho mal y por lo que han dejado de hacer en los últimos encuentros.

No habrá mañana, o se alinean o se marchan.

 
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