Vacaciones, ¿merecidas?

 
El receso por la Fecha FIFA le otorga a varios clubes la oportunidad de hacer un paréntesis, de replantear en caso de crisis o de trabajar para corregir errores.

Excepto con los Zorros, quienes después de haber perdido el viernes en Querétaro terminaron tan exhaustos y acalambrados, que el cuerpo técnico optó por darle a los jugadores tres días libres -o sea, vacaciones-, que varios aprovecharon para disfrutar de las bondades de alguna playa mexicana.

Mientras unos optaron por Cancún (¡saludos, Edy Brambila!) y otros meditaron sobre sus errores en Puerto Vallarta (¡saludos, Édgar Castillo!), los aficionados mantienen su enojo por la fea forma en que cayeron en La Corregidora frente al equipo del siempre alegre y fiestero Ronaldinho.

Esas minivacaciones o días de recuperación, como le quieran llamar, se terminarán hoy, cuando viajen a California, donde mañana se medirán en un amistoso al León.

No tengan duda que, de paso, los Rojinegros aprovecharán para pegarle al viático y hacer algo de shopping, al cabo que lo que sigue en su agenda es ni más ni menos que el Clásico Tapatío, para el que todavía faltan doooce días, así que ¿cuál es el apuro?

¡Chulada!

 
 
 
 
Calma, hijo, calma
 
 
Aquí les conté que en el Morelia, tanto jugadores como empleados se sentían poco menos que ignorados por la empresa que aún es dueña del equipo, más cuando veían que le dedicaban más amor y atención al Atlas, el nuevo hermano consentido, que a lo que queda de Monarcas.

Pues bien, con la idea de apaciguar los rumores de una posible venta -algo más que cantado, dirían algunos- los dueños invitaron al plantel a visitar las instalaciones de TV Azteca, en una demostración de que sí les tienen aprecio, que no son el hijo ignorado y que no le comiencen a tomar envidia al hermano Zorro.

Es por ello que varios jugadores anduvieron en los foros de televisión, en varios programas, regalando playeras autografiadas al auditorio con la idea de que "siempre" estarán juntos el equipo y la televisora, y todos muy felices como la bonita familia que fueron en sus años de brillantez.

Lo que obviamente no se dice en los programas, es que en realidad sí hubo intención de vender a los michoacanos, pero que en la tremenda caída que sufren en la Liga y en la Tabla de Cocientes, los posibles interesados ya no están tan entusiasmados, por lo que más que un acto de amor y cobijo, fue una estrategia para intentar reanimar al equipo y no siga devaluándose más de lo que ya está.

¡Ojo! que con la derrota que sufrieron el sábado en Pachuca y el despegue de las Chivas en lo que queda del Clausura, el próximo año futbolístico los Monarcas arrancarían como los últimos en el promedio.

Así que, si en Michoacán saben rezar, vayan comenzando a buscar veladoras.

 
 
 
 
Notihachazos
 
 
Y como ayer comentábamos, el "Matosismo" comenzó con su sistema de amagues de aparentes renuncias en el América para luego recular e intentar reanimar a su millonaria plantilla, tal y como lo hacía el uruguayo en el León; por lo pronto, Gustavo Matosas ya se comprometió a que su equipo rescatará la eliminatoria en la Concachampions y que enderezará el rumbo en la Liga, en donde ya casi tienen por delante el Clásico Nacional. Casi nada.

- El que se vio generoso con sus escualos fue el dueño del Veracruz, Fidel Kuri Grajales, quien les prometió a sus jugadores no sólo la prima doble por ganarle al América, sino incrementar los premios pactados por salvar el descenso, en caso de avanzar hasta las Semifinales en la Liguilla. ¿Qué tal? Ya saben, si ven a unos Tiburones más hambrientos de lo acostumbrado, no les extrañe que la motivación sean muuuchos ceros.

 
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