Neymar y Messi tomaron más días de descanso a finales del 2014 que el resto de su equipo, pero eso no es exclusivo de allá: un buen numero de futbolistas que militan en México gozan de permisos para incorporarse más tarde a las pretemporadas.
Hoy, los jugadores más representativos de un equipo, en términos de liderazgo, publicidad, rendimiento o salario, son quienes solicitan tener mayores concesiones.
Lo que debe ser una cuestión básica de disciplina y respeto en cualquier equipo, se ha ido desvirtuando hasta convertirse en una constante, justificada por el técnico y las propias directivas.
Es decir, independientemente de los conflictos internos en el vestidor del Barcelona, el DT, Luis Enrique, debió prescindir de sus dos máximas figuras en el primer partido del año, porque llegaron con menos de 48 horas de anticipación. Los cuestionamientos fueron dirigidos hacia el entrenador, por no incluirlos en el "11" titular y, posteriormente, por ingresarlos como relevos cuando el juego se perdía y, de hecho, se perdió. Ni Messi ni Neymar fueron acusados por llegar tarde.
El caso de Ronaldinho es de no creerse. Entre el Apertura 2014 y el Clausura 2015 transcurrió menos de un mes, pero para los Gallos fueron siete semanas entre cada uno de sus juegos oficiales. Tiempo adecuado para trabajo físico, técnico y partidos de preparación.
Ronaldinho se presentó tras 29 días de vacaciones y muy poco tiempo antes del inicio del torneo... 29 días de permiso para un veterano como el brasileño es inconcebible, si es que se pretende un rendimiento de acuerdo a las expectativas y, por supuesto, de acuerdo a lo que se le paga. De entrada Nacho Ambriz, técnico del Querétaro, anunció que el brasileño estaría fuera por tres semanas, para trabajar físicamente y recuperar su forma. Su debut se daría hasta la Fecha 4. Sin embargo esta semana se anunció que no pudo entrenar por una fuerte gripe, lo que seguirá aplazando su regreso a las canchas.
No es sólo el costo - beneficio de una contratación tan cara como explotable comercialmente, sino el ambiente que se genera dentro de un equipo. Las estrellas de hoy consideran que deben tener privilegios sobre el resto de sus compañeros y se olvidan de lo que representa un buen ejemplo para los futbolistas que comienzan. El compromiso es mayor mientras más jerarquía se gana, mientras más dinero se gana y mientras más credibilidad se gana.
Hoy nos parece de lo más normal enterarnos sobre las llegadas tardías de las grandes estrellas a sus equipos y, peor aún, se tiende a cuestionar solamente al técnico por el estado de esos jugadores. Cada quien su negocio, su imagen y su dinero, pero estas excepciones son un pésimo ejemplo que desgraciadamente resulta repetitivo y que indiscutiblemente afecta a un equipo tarde o temprano.
@Felixatlante12 ffernandez@reforma.com |