Amables aficionados: en forma similar a un ratón relamiéndose los bigotes ante un plato de buenos quesos, así se presenta el panorama para los aficionados para esta fecha 11 de la NFL.

Roquefort (de oveja).- El drama en Arizona al tambalearse sus posibilidades de ser anfitrión en el Súper Tazón. Hoy les toca enfrentar a un potente equipo de Detroit cuya diferencia básica en esta ocasión es que están ganando los juegos apretados que antes perdían.

Han ganado 4 en forma consecutiva y continúan de líderes divisionales. Es una prueba muy difícil para el mariscal sustituto Drew Stanton y para que los Cardenales puedan ganar este juego su defensiva y equipos especiales van a tener que brillar intensamente.

Éste es el juego pivote para Arizona para ver hasta donde llegan con Stanton.

Gruyere.- Seattle va a sentir en carne propia lo que sufren sus oponentes con el ruido al visitar a Kansas City y un estadio tan o más ruidoso que el propio.

Es un enfrentamiento clave para los Halcones Marinos, que no se han visto bien como visitantes, siguen a dos juegos del líder Arizona y tienen a San Francisco pisándoles los talones.

Los Jefes urgen de la victoria ya que están un solo juego atrás de Denver y uno sobre San Diego, no tienen margen de error. Creo que sacarán un apretado triunfo.

Brie.- En Indianápolis estarán enfrentados el presente y el futuro, Tom Brady y Andrew Luck, en un partido muy atractivo entre líderes divisionales.

Los Potros son muy efectivos en casa, en donde sólo han perdido en una ocasión en esta campaña y son marcados favoritos.

Sin embargo, el entrenador Bill Belichick, de los Patriotas, ha tenido una semana extra para preparar este encuentro, pues vienen de su semana de descanso. Cuando esto sucede, casi siempre logra imponerse.

Si no el más dramático, éste tiene el potencial de ser el más interesante, con muchos puntos anotados.

Comté.- Finalmente, en el Lambeau Field, Green Bay recibe a Filadelfia en un encuentro importante de medición de fuerzas.

Las Águilas ahora dependen de Mark Sánchez y éste será su juego más importante en varios años.

La pregunta es si la defensa de Filadelfia podrá contener a un Aaron Rodgers que está jugando en forma extraterrestre.

No será fácil, creo que Filadelfia anotará su cuota de puntos, pero los Empacadores aún más.

Ahora sólo falta una baguette, una botella de tinto y "bon appetit".

Por ahora, hacemos una pausa...

 
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