Si aún no lo dábamos por hecho, teníamos un gran presentimiento que de los tres equipos que entraron en 2010, de los que ahora sólo Caterham y Marussia habían sobrevivido, las nuevas reglas sería la prueba vital, y por desgracia ambas escuderías también tuvieron que tirar la toalla.
El caso de Caterham es complicado, tiene muchas peleas legales entre los primeros propietarios y los compradores, y no se sabe quién es en realidad el dueño de las deudas, lo único que le queda al equipo.
A Marussia de seguro lo veremos en Abu Dhabi. Con sólo dos fechas perdidas, podría correr la última prueba del año sin perder las ventajas de la F1 al estar entre los 10 primeros gracias al noveno lugar de Jules Bianchi en Mónaco; el equipo recibirá mejor porcentaje de premios y los viajes gratis en 2015 equivalentes a muchos millones de dólares, que lo haría más atractivo en caso de una eventual venta de la franquicia.
Tal vez, como dice Max Mosley, la F1 no es una competencia justa. Desde el punto de vista deportivo, se debería repartir la bolsa en partes iguales, ya que para los equipos grandes es más fácil obtener patrocinadores y después fijar un límite presupuestal. Ya se intentó controlar los costos y resultó un fracaso, así que espero encuentren otra solución, y rápido, porque tres autos por equipo no creo que lo sea.
En el mercado de pilotos, la saga del prepotente Fernando Alonso, quien después de declarar que en la F1 todo gira en torno a él, queda fuera de Ferrari y se niega a revelar su futuro, aun si sólo falta su firma en el más lucrativo contrato nunca antes visto en F1 con Honda-McLaren; como siempre, el mejor piloto de la actual década, sigue siendo el más complicado.
De seguro Alonso no tendrá una salida tan limpia de Ferrari como muchos lo hubieran querido, y la Scuderia empieza una nueva era en su fascinante existencia con un nuevo presidente con mano dura, Sergio Marchionne, y Sebastian Vettel será apenas el tercer alemán entre sus pilotos. Los otros fueron Von Trips y Schumacher. Ferrari también se separa del grupo Fiat-Chrysler.
Sobre la carrera de Austin en Texas, donde todo es grande, tendrá la parrilla más pequeña del año y no esperamos mucha emoción. El circuito es bonito y de seguro habrá bastante ambiente, la mayor parte gracias a los alborotados mexicanos en las tribunas, pero con un asfalto tan limpio y unas Pirelli cada vez más aguantadoras no creo que se tendrá más de una parada, lo que no ayuda para hacer una carrera interesante.
Nuestras porras estarán con "Checo" Pérez y Esteban Gutiérrez porque sus actuaciones serán decisivas para conservar o mejorar sus asientos rumbo a 2015.
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