Ya llegó el galán de las arenas, el consentido de Las Divas, listos para comentarles lo más relevante del pancracio universal.
El Consejo Mundial de Lucha Libre celebró el 81 aniversario de´"Doña Lucha" con bombo y platillo.
Realmente tuvieron una función impresionante, que sin duda los reconcilia con los aficionados, que se fueron muy molestos de la celebración del año pasado y que se habían alejado de las gradas de La Arena México.
De principio a fin fue un magno evento, pero hubo tres batallas que se robaron la atención.
El torneo de amazonas fue espectacular, la batalla por la copa entre Zeuxis y Marcela fue de lo mejor, la ruda se la llevó y dejó en claro su calidad, esta chica tiene gran talento sólo necesita proyección.
En la lucha por el título de parejas del CMLL, Negro Casas, Shocker, La Máscara y Rush dejaron en claro que además de que son verdaderas estrellas, no se necesitan siempre relevos australianos en las luchas estelares, los sencillos, cuando son de calidad, prenden al público y muy cañón.
Y la lucha de máscaras, simplemente fue de otro nivel, Atlantis y Último Guerrero demostraron por qué tienen la rivalidad más importante de los últimos 10 años y dieron una batalla de colosos.
Sin trampas ni cosas raras, el Ídolo de los Niños conquistó una de las tapas más importantes de su carrera y confirmó que es, desde ya, una leyenda de la lucha libre.
La grandeza de las máscaras que ha ganado lo colocan en un nivel sólo comparable con el del Santo. Habrá quienes tengan más tapas conquistadas, pero de la calidad de ellos dos, nadie.
Y el Último Guerrero demostró más calidad y honor que todos en la derrota, entregar su incógnita con lágrimas en los ojos, pero reconociendo la calidad de su verdugo... es de grandes.
Eso sí, el CMLL tiene ahora una gran misión pues el público regresó a La México, ahora queda en ellos que no se vaya.
Lo que no me latió, es que Dr. Wagner Jr. salió de huelemoles, pues ahora retó a Atlantis a un duelo de máscaras vía redes sociales, cuando todavía no arregla sus broncas con L. A. Park, mal, mal mal.
Donde también estuvieron buenas las cosas fue en Night of Champions.
John Cena demostró que puede darle batalla a Brock Lesnar y estuvo cerca de recuperar el título de la WWE, pero la intervención de Seth Rollins se lo impidió.
Por cierto, Roman Reings no se presentó a esa función porque fue intervenido de una hernia y estará seis semanas fuera de circulación.
Los que aprovecharon la oportunidad fueron Goldust y Stardust, quienes se convirtieron en los nuevos campeones de parejas de la WWE al vencer en una candente batalla a Los Uso.
Y en el duelo por el título de Divas, AJ derrotó a Nikki Bella y Paige para convertirse en la nueva monarca. La neta, estas tres se dan con todo, y las batallas cada vez son mejores.
Ya me voy, tengo que seguir consolando a mi Paige, quien no ha querido salir de la cama desde que perdió y ni modo de dejarla solita.
Ahí nos vemos y recuerden, soy un lujo... pero lo valgo.
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