Hay portero
 
 
A el único que parece le están saliendo bien las cosas dentro de las Chivas es a Antonio Rodríguez.

En medio de la crisis, el portero ha tenido buenas actuaciones y en Europa ya se maneja interés de equipos alemanes y franceses.

El que más lo ha buscado es el Niza, de la Liga 1, la cual ya se dio cuenta que los arqueros mexicanos tienen buenas condiciones y están bien trabajados, tras los buenos años de Guillermo Ochoa en el Ajaccio.

No sé si le alcance el tiempo a Rodríguez para emigrar, o si las propuestas económicas sean muy serias, pero lo único que les puedo decir es que tiene menos de una semana para que se concrete su traspaso, sino será pura intención, como cuando quisieron fichar a Marco Fabián o recientemente a Néstor Vidrio.

Pero eso no es todo, el cancerbero ya está en la mira de Miguel Herrera. Diego Ramírez, auxiliar del "Piojo", le echó un ojo ante Santos y, al ver sus cualidades, el entrenador de porteros, José Torruco, se lanzó de su casa en Poza Rica para ir al duelo ante el Veracruz para darle otra checada.

 
 
 
 
¡Vaya ejemplo!
 
 
Para todos los que pensaban que el único problema en Pumas es la crisis deportiva están equivocados, pues me enteré que también se vive un duro caso de bullying.

Hay un integrante en la plantilla que últimamente se la vive molestando a sus compañeros más jóvenes, quienes no se le ponen al tú por tú por su jerarquía. Esta situación ya se está haciendo muy común dentro del vestidor sin que nadie haga algo y a las víctimas de las burlas no les queda más que aguantarse.

Y así como le gusta molestar a los novatos, a los extranjeros les aplica otra técnica: una cruel indiferencia.

En fin, en lugar de aprovechar su posición dentro del grupo para fortalecer la unión y darle un ejemplo a los canteranos, pareciera que Darío Verón prefiere sacar ventaja de ser capitán para divertirse a costa de los demás.

 
 
 
 
Le falla la 'maquinita'
 
 
No cabe duda que "la máquina" ahora sí le jugó una mala pasada a Luis Fernando Tena y a su cuerpo técnico.

Pero no me refiero a las desventuras de Cruz Azul en lo que va de la Liga y la "Concachampions", sino a los parquímetros que pusieron a sufrir a Salvador Reyes Jr. y al "Flaco".

Cuentan que el viernes, previo a la última práctica de cara al duelo ante Querétaro, el auxiliar técnico del equipo cementero apoyó para que, ahora que nada les salía, la grúa no se llevara el coche de Tena estacionado en la colonia Nochebuena.

El problema es que nomás se veía a Chava entrar y salir del Estadio Azul, tres veces, y el boleto no quedaba, al grado de que el "Flaco" tuvo que ir a arreglar el asunto.

El DT verificó por sí mismo que "la máquina" no aceptaba monedas, hasta que a las mil por fin le hallaron el modo y, entonces sí, pudieron dedicarse a diseñar la estrategia para la victoria de la otra Máquina ante los Gallos Blancos en el Azul.

 
 
san.cadilla@reforma.com