La lana de Chava
 
Me cuentan varios amigos que vieron muy bien a Salvador Cabañas ahora que vino para su segundo homenaje a Chiapas.

Cuentan que ya lo notan más sereno y un poco más lúcido, y ahora que ya quedó divorciado de María Alonso, pues llegó a Tuxtla Gutiérrez con más disposición y sin tantos problemas de seguridad como la vez pasada, cuando su ex mujer andaba cobrando las entrevistas en 50 mil dólares, según esto porque ya no tenía dinero.

Esta vez fue un promotor el que se echó la bronca de traerlo y la mayoría de sus gastos corrieron por parte del Gobierno del Estado de Chiapas, que además aprovechó al ex jugador americanista para hacer algunos promocionales.

Varias personas cercanas me platicaron que hoy, como nunca, Cabañas necesita entradas de dinero extras porque la situación financiera no mejora en casa de sus padres.

Ojalá y que quienes tuvieron los tamaños para pedirle lana prestada para hacer inversiones antes de 2010, tengan los pantalones para hacer memoria primero y para pagar después... ¿O usted también perdió la memoria por el balazo que le dieron a Cabañas, señor Infante?

 
 
Mucha competencia
 
Marco Fabián ha de andar muy contento porque abrió su escuela de futbol en Guadalajara, pero más le vale ponerle empeño, porque vaya que tendrá competencia.

Además de las escuelas oficiales de Chivas, Atlas y UdeG, dominadoras del mercado tapatío, resulta que, en poco menos de un mes, el ex futbolista Reinaldo Navia inaugurará su propia escuelita, que llevará el rimbombante nombre de Academia de Futbol Oficial de Reinaldo Navia.

Aunque cualquiera me podría decir que la de Fabián lleva ventaja por haber abierto antes, sepan ustedes que el negocio del chileno ya lleva al menos un mes haciendo campaña.

¿Cómo ven si en unos seis meses volvemos a hablar de este tema?

 
 
Magos de las PRs
 
Mis respetos para la gente de Grupo Pachuca, todos unos maestros para eso de las relaciones públicas.

Justo en medio de su bronca con el duopolio televisivo por su apoyo al ingreso de Carlos Slim al futbol mexicano, Jesús Martínez y su hijo se dieron el lujo de invitar ni más ni menos que a Decio de María al partido Barcelona-León del lunes pasado.

El presidente de la Liga MX, a quien inevitablemente se asocia con una de las televisoras, fue "espectador de lujo" del baile que les pusieron los culés a los esmeraldas y, según dicen, viajando en primera clase, lo cual me deja claro que los Martínez saben cómo llevarla con todos los bandos en tiempos de paz, para que las cosas les favorezcan si el clima cambia.

 
 
san.cadilla@reforma.com