Un prietito...

En el mercado invernal de la Temporada 2008-09 de la Liga española, previo a las llegadas de Cristiano Ronaldo y Kaká al Real Madrid, un fichaje de los merengues llamó la atención de la prensa española... por absurdo.

El 30 de enero del 2009, a punto de sonar la chicharra y con la urgencia de llenar uno de sus huecos en el ataque, la directiva madridista hizo oficial la contratación de un extremo francés procedente del West Ham United: Julien Faubert.

Faubert (1 agosto 1983, Le Havre, Francia) fue cedido por el club inglés a cambio de 1.5 millones de euros por 4 meses, con la posibilidad de una compra por 6 millones, opción que jamás fue tomada muy en serio, ni por el mismo Julien.

El fichaje fue sorpresivo debido a la pobre forma física de Faubert y porque ni siquiera era titular indiscutible en Upton Park, a donde llegó para el recién ascendido West Ham, tras sus destellos de buen futbol con el Girondins de Burdeos.

Antes fue pretendido por el Glasgow, aunque al fin fueron los "Hammers" quienes pagaron los 7 millones de euros que pedían por él. Una mala apuesta si consideramos que se pasó 6 meses en el hule tras romperse el tendón de Aquiles.

Tales antecedentes hacían inexplicable la decisión de contratarlo de Pedrag Mijatovic, director de futbol del Madrid, y la anuencia de Vicente Boluda, presidente interino del club tras la polémica salida de Ramón Calderón, acusado de fraude por la Asamblea.

 
 
DEBUT Y DESPEDIDA
 
La llegada de Faubert a Las Rozas fue una incógnita no sólo para medios y afición, sino para el propio técnico, Juande Ramos, quien negó haber recomendado su contratación.

Con todo, lo debutó en la Liga en un partido contra el Racing en el Bernabéu; al final, el propio Ramos catalogó su accionar como "muy gris."
 
Fueron en total 54 minutos -30 ante los de Santander y 24 más frente al Athletic de Bilbao- los que disputó el también lateral derecho con el conjunto merengue, muy pocos para alguien con una extraordinaria técnica para cabecear... Sí, pero en el banquillo.

Y es que para el "Top Ten" de los momentos más bochornosos del Madrid quedará la ocasión en que, al parecer cansado de no ser tomado en cuenta por su técnico, se durmió en plena banca de El Madrigal.

"Es muy duro vivir esto. Ni siquiera sé por qué, nadie me ha explicado por qué no juego", había dicho Faubert en una entrevista al diario L'Equipe.

En ese juego contra el Villarreal, que perdieron 3-2, al Madrid le urgían los puntos para no regalarle la Liga al Barcelona, pero la actitud desenfadada y hasta cínica de Faubert fueron evidenciadas por las cámaras de TV. ¿Quién creen que fue el campeón esa temporada?

Para el recuerdo también quedará la vez que Faubert -cuya mancuerna con el holandés Drenthe fue excepcional... para hacer bromas- se ausentó de un entrenamiento, creyendo que les habían dado el día libre.

"El chico se ha confundido, nada más", salió en su defensa Sergio Ramos. "Él sabe que el club tiene un régimen interno que hay que cumplir".

El desenlace no podía ser otro. El Madrid no hizo válida la opción de compra y el francés regresó al West Ham.

 
 
SUCESOR DE ¡ZIDANE!

Por increíble que parezca, Faubert tuvo un partido como internacional con la selección francesa, y no sólo eso, sino que lo hizo portando en la espalda el "10" que dejó vacante Zinedine Zidane tras su retiro del combinado galo.

Raymond Domenech, entonces DT de Les Bleus, lo convocó para un amistoso contra Bosnia y Herzegovina, en agosto del 2006.

Y aunque anotó en el último minuto el gol de la victoria (2-1), no volvió a ser requerido.

Para la Temporada 2013-14, tras una breve experiencia con el Elazigspor turco, Faubert regresó al Girondins de Burdeos, donde se consolidó como titular.

"Futbolista profesional del Girondins de Burdeos, ex de West Ham United y Real Madrid, e internacional francés. Padre de dos chicos increíbles", aparece en su perfil de Twitter.

Reclámenle algo.

 
 
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