En el mismo lugar y con la misma gente. Con los afectos y fobias ya conocidos en un nuevo torneo del futbol mexicano.
Y escuchando quejas por las mismas cosas: Chivas trae a un ex formador del Barcelona a las fuerzas básicas. Algo en lo que el Guadalajara destaca por su trabajo interno, adquiere un refuerzo que nacido en México según algunas fuentes, se formó en el extranjero.
Nada puede ser juzgado antes de ser conocido, aunque los antecedentes inviten a la condena.
Juan Manuel Herrero deja Chivas. Asido de la ética, atribuye la decisión a motivos personales. Un directivo más que pasa por el Rebaño sin poder dejar huella pese a sus buenas intenciones.
Se habla de los duelos entre hermanos. Casi tan añejos como Caín y Abel, el enfrentamiento entre equipos del mismo dueño levanta suspicacias no comprobadas, pero tampoco deseadas. Morelia y Atlas tienen el turno en la discreta segunda fecha del torneo, donde las necesidades parecen menos y por lo tanto casi no se notan.
Desde Querétaro, Adolfo Ríos cuestiona a la Comisión de Arbitraje. Extraño de un personaje al que difícilmente se le escucha hablar mal de alguien. Le entra a la hoguera verbal en la que el árbitro es el primero en ser quemado.
Gana sólo un local en la jornada inaugural. En cinco de los nueve partidos, solamente se marca un gol o ninguno. El 1-1 entre Chivas y Jaguares hasta parece un lujo.
Se discute si llega demasiado temprano el duelo entre Pumas y Chivas para el domingo. Suena a platillo fuerte aunque suelen decepcionar cuando se enfrentan entre sí. Vuelve a oler a empate, resultado mandatario en sus tertulias.
Pese al buen Mundial para algunos jugadores mexicanos, no suena la registradora de las ventas al extranjero.
Ni para Guillermo Ochoa, de quien se oye poco mientras Miguel Herrera revela públicamente pláticas internas de un asunto de interés general, que fue su decisión para poner en el arco al propio Ochoa. Tampoco es que se haya dicho algo anormal: que Corona se haya molestado es lo más natural en el mundo del jugador competitivo que es desplazado por un colega.
Se aborda sobre los mismos asuntos de siempre, los problemas en que se atoran nuestras charlas son los mismos. Vuelve la rutina esperando encontrar una perla en el camino, un jugador que salte de lo común, un equipo que juegue buen futbol, una Liga que encuentre la consistencia, un árbitro que tome el lugar de primera figura que deja vacante Marco Antonio Rodríguez.
Se parece a lo de siempre, pero es lo nuestro. De donde nace todo lo demás, incluyendo la ilusión de hablar algún día de temas más trascendentes que los referidos.
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