El agente de viajes
 
Miguel Herrera no sólo fue un técnico aplaudido en el Mundial, sino también un reconocido agente de viajes.

Cada que alguno de sus jugadores tuvo problemas para llevar a sus familias a las sedes donde jugaba el Tri, el estratega tricolor se levantaba temprano, se conectaba a Internet y se ponía a ayudar a los familiares para que encontraran vuelos y hospedajes cerca de los fortines mexicanos.

Para el "Piojo" era importantísimo que los jugadores no se se preocuparan por asuntos familiares, pero sobre todo esto le sirvió al estratega para hacer mejor grupo y es que sus pupilos vieran que el entrenador hizo hasta lo imposible por ayudarlos.

Algunos familiares le pedían que no se preocupara, pero el estratega insistía hasta que conseguía dejar a todos satisfechos con sus viajes.

Tan bueno fue el servicio que dio el "Piojo" que en varias ocasiones ha se las arregló para que algunas familias se hospedaran en el mismo hotel del Tri, aplicando incluso el generoso gesto de pasar su tarjeta para las reservaciones y el "ahí luego me pagan" para hacer felices a los allegados de sus pupilos... Vaya corazón.

 
 
El 'table' de Santos
 
Y ya que andamos con guías de turistas, me enteré de una forma muy circunstancial que a algunas Selecciones sí les viene bien eso de relajar la concentración y que sus jugadores se diviertan como mejor les agrade, claro, mientras no se dediquen ponerse hasta las manitas de alcohol o a vicios más nefastones como el cigarro.

Pero tal parece que en cuanto a la sorprendente Costa Rica no hubo mucho problema en que algunos de sus jugadores se dieran una escapadita nocturna en compañía de otros futbolistas que les sirvieron como guías de turismo.

Resulta que algunos futbolista del Santos FC hicieron cierta amistad con dos que tres seleccionados ticos a raíz de que los costarricenses entrenan en el estadio del club brasileño en Vila Belmiro.

Pues sucede que de tanta camaradería que hicieron pues los del Santos invitaron a los ticos a un lugar de "sano esparcimiento" para festejar el paso del equipo centroamericano en el Mundial. Así que justo en uno de los table dance más conocido y sugerido de la ciudad se fueron a meter cuatro jugadores de Costa Rica con sus amigos santistas. Eso sí, me comentan que nada de alcohol, sólo fue pasar el rato y tener una buena vista... bueno, entretenerse un poco.

Lo sorprendente es que eso habría sido antes del juego contra Inglaterra, el cual empataron a cero y amarraron así el primer lugar de su grupo. Así que en nada les afectó su tour nocturno.

Y para los que tengan la duda, los jugadores mexicanos no se han parado por ahí, ni por algún lado similar y la misma gente de Santos comenta que están bien custodiados y no los dejan salir por la noche ni a comprar el pan y la leche. Cada quien su estilo.

 
 
san.cadilla@reforma.com