Uno de los factores que más incide en la aparición de la fatiga para un corredor es la acumulación del ácido láctico cuando se corre por arriba de cierto nivel de esfuerzo.
La acumulación de lactato en los músculos que trabajan es la causa directa de la fatiga para algunos autores, mientras que para otros esa acumulación emite una señal que llega al cerebro, que es de donde se genera la señal de la fatiga.
La verdad es que los análisis del origen y la naturaleza de la fatiga y los efectos del ácido láctico están siendo estudiados desde varias perspectivas y por diferentes investigadores, por lo que las nuevas propuestas acerca del manejo del lactato surgen antes de que las previas se confirmen o se descarten.
La fórmula más conocida para evitar los efectos del ácido láctico consiste en elevar el nivel de umbral de lactato, es decir, elevar el nivel de esfuerzo a partir del cual la generación de lactato se dispara de tal manera que no se alcanza a consumir ni a eliminar, por lo que la fatiga aparece.
Se trata de que el nivel de umbral de lactato sea más alto para que se pueda correr a más velocidad o por más tiempo antes de que el ácido láctico se acumule. La idea es evitar su acumulación.
Eso se logra a través de sesiones de "tempo" que se corren precisamente al nivel de ese umbral, que fluctúa entre el 80 y el 88 por ciento del Ritmo Cardíaco Máximo del corredor.
Dentro de este esquema hay propuestas como la del estadounidense Jeff Gaudette, quien sugiere que más que evitar la acumulación del lactato, lo que debiera hacerse es que el organismo "aprenda" a eliminarlo.
Lo que él propone es cambiar el objetivo de retrasar la generación de lactato por elevar la eficiencia con la que el organismo lo utiliza o lo elimina.
¿Cómo puede lograrse ese aprendizaje?
Lo que Gaudette propone es una leve variante las sesiones de tempo: alternar diferentes ritmos de carrera dentro de la misma sesión.
La idea es alternar kilómetros que se corren a "ritmo de umbral", con kilómetros que se corren un poco más rápido, con el fin de que si los kilómetros más rápidos generan más lactato, el organismo "aprenderá" a eliminarlo en los kilómetros menos intensos. El tema da para mucho.
Recuerda que correr es salud y algo más... mejor calidad de vida.
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