Señoras y señores, se fue, se fue la Selección Nacional. Y no a Brasil, sino a EU a buscar algo de futbol porque en el Azteca no lo encontró.

Primero, como siempre, no tuvo rival. Y le prepararon un homenaje a Cuauhtémoc Blanco, que fue significativo para él y quizá para los seguidores, pero ¿qué era más importante, el homenaje o la Selección? Por supuesto, para los organizadores, el homenaje.

La Selección jugó como pudo. Un equipo que está deshilachado, que no está armado ni preparado para competir.

Yo no sé si los partidos que le quedan le den el volumen futbolístico que requiere.

El miércoles, si no es por el portero de Israel, quizá el partido terminaba 0-0. Pero el resultado es lo de menos, la actuación es lo más importante y la actitud. Algunos la tienen, otros menos, y otros da la impresión que no saben lo que representa un Mundial.

Es verdad que muchos debutarán en la Copa, incluyendo al técnico, y otros son veteranos y tienen más experiencia, pero México tendrá que mejorar muchísimo en los partidos que le faltan. Ecuador es muy competitivo, tiene buen equipo. Bosnia-Herzegovina no es de los mejores de Europa, pero Portugal sí lo es y si juega completo puede ser un sinodal clave muy cerca de la Copa.

Yo quisiera preguntar qué Selección que está en preparación para la Mundial, jugando amistosos, sus jugadores se la van a jugar o van a meter el pie con todo para buscarse una lesión.

Quizá sea por la exigencia tan larga de las Ligas de Europa que hace que los jugadores lleguen muy castigados al torneo, pero algunos se quedan en el camino y otros tienen que seguir andando con sus Selecciones y jugar infiltrados.

Pero bueno, así son las Copas del Mundo, y así las organizan, muy pegadas a los torneos de UEFA y Conmebol.

Ayer platicaba con Hugo Sánchez sobre quién llega mejor al Mundial: si el futbolista que recién terminó el torneo, o los que ya tienen tiempo que terminó y están más descansados. Él me contaba que llegan mejor los que han rendido al tope hasta el último momento porque llegan muy motivados, ganando o perdiendo, llegan muy arriba en su condición física y arrancan con buen nivel la Copa.

México debe mejorar muchísimo de lo que vimos el miércoles en el Azteca a lo que veremos ante Camerún, y le quedan tres partidos en una sola semana: el sábado, el martes y el viernes, con equipos mundialistas, para formar al equipo titular que enfrentará a Camerún, Brasil y Croacia.

Esperemos que por bien de los jugadores y del propio entrenador, mejore, porque sino estarán muy pronto de vuelta en casa. Pero ojalá que la Selección tenga un buen camino de cara a la Copa y, sobre todo, que estos partidos que le vienen en EU le sirvan para tener ya el cuadro titular.



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