Es interesante revisar los efectos de correr en el calor cuando estamos a punto de entrar a la temporada de verano, en la que además de participar en carreras de diferentes distancias, algunos entrenan para un maratón en el otoño.

¿Cómo afecta el calor al correr? La verdad es que entender los efectos del calor sobre el organismo es de gran utilidad para saber cómo administrarse tanto en las competencias como en los entrenamientos, pero sobre todo para evitar sufrir un golpe de calor.

La temperatura del organismo en estado de reposo fluctúa entre los 36.5 y los 37 grados centígrados y tiende a elevarse al empezar a correr a causa de la parte del calor corporal que genera el ejercicio que no se disipa al exterior.

En la medida que la temperatura ambiente sea más alta, la cantidad de calor que se disipa es menor y la cantidad que se acumula en el cuerpo aumenta, lo que a su vez eleva la temperatura corporal. A eso debe agregarse el calor que el cuerpo absorbe de la radiación solar y en casos extremos del medio ambiente.

Una parte importante del calor que se genera al correr se disipa al exterior a través del sudor. Ese sudor es fluido que proviene del torrente sanguíneo, lo que significa en la medida que se suda se reduce el volumen de la sangre, aunque para eso ayuda lo que se ingiere durante la carrera.

La reducción del volumen de la sangre obliga al corazón a dar más latidos por minuto para mantener el volumen de oxígeno que le manda al organismo, que es lo que necesita para hacer el trabajo de correr.

Es posible que el rimo cardiaco se eleve entre un cinco y un ocho por ciento cuando lo que se pierde por volumen de sangre supera al dos por ciento del peso corporal del corredor. En lugar de correr a 165 latidos por minuto se correrá a 175 latidos por minuto o más. Y esos se percibe.

Cuando la pérdida de fluido aumenta, se limita la cantidad de calor que se disipa, y eso acelera la elevación de la temperatura del cuerpo.

¿Para qué sirve esta información?, Sirve para entender que difícilmente se podrá romper un récord personal corriendo en calor, y que las carreras largas, en especial las de 21 kilómetros o más, no debieran celebrarse en el verano.

Recuerda que correr es salud y algo más... mejor calidad de vida.
 
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