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La Dominguera
San Cadilla | 02-02-2014
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Los villamelones
 
 
El "Güero" Real puso el dedo en la llaga: no quiere villamelones criticando a las Chivas.

¡Guau! Leer para creer. José Luis Real haciendo una declaración fuerte y que caló en muchos aficionados.

¿Quiénes se deben sentir aludidos?

Como dicen en la 5 de Febrero: Vamos por partes.

 
LA HISTORIA
 
No he de negar que la primera vez que escuché el término fue en mi infancia, en corridas de toros. De hecho, proviene de la Madre Patria.

De acuerdo al escritor Arturo Ortega Morán, la palabra "villamelón" tiene su origen en España, entre finales del siglo 18 y principios del 19, cuando comenzaron a llamar "melones" a quienes consideraban tontos, definición que sigue vigente en el diccionario.

"Luego, el ingenio popular creó el hipotético pueblo de Villamelón, de donde provendrían estos personajes con mote de fruta que, siendo rústicos e ignorantes, intentaban incorporarse a la 'culta' sociedad española de aquel tiempo", explica.

La principal cualidad del villamelón en el futbol no es desconocer del deporte, sino creerse un experto... y gritarlo a los cuatro vientos.

Pero entonces ¿Quiénes saben de futbol? ¿Cómo darme cuenta si yo sé de futbol o en realidad soy un villamelón?

 
SABER DE FUTBOL
 
¿Qué es saber de futbol? Cada quien tiene su respuesta a la anterior pregunta en el medio del futbol.

Según ha declarado Ricardo Antonio La Volpe, para saber de futbol hay que haber jugado por lo menos ocho partidos en Primera División o entonces no se tiene ni idea.

De acuerdo a esta regla, entonces Marcelo Bielsa, quien apenas y disputó dos partidos, no sabe ni papa; y de Arrigo Sacchi o José Mouriño ya ni hablamos.

"(En el futbol) vivimos en un torbellino de la dialéctica, donde los que saben poco intentan hacer creer que saben mucho a los que no saben nada", decía el legendario periodista argentino Dante Panzeri.

Saber de futbol, a mí entender, no es recitar la alineación con la que las Chivas perdieron en la Jornada 37 de la temporada 82-81, aunque son conocimientos que, por supuesto, no estorban.

Pero saber de futbol tampoco es necesario explicar ante un pizarrón qué son las permutas, las temporizaciones, los repliegues, las interceptaciones y toda la terminología de los entrenadores.

Para mí saber de futbol es tener conocer sus reglas, su historia, sus estrategias y su entorno. Dicho de otra manera, contar con las herramientas no sólo para comentar el resultado de este partido, sino explicar por qué se dio el resultado.

"Hay quienes sostienen que el futbol no tiene nada que ver con la vida del hombre, con sus cosas más esenciales. Desconozco cuánto sabe esa gente de la vida. Pero de algo estoy seguro: no saben nada de futbol", escribió Eduardo Sacheri en su libro "Esperándolo a Tito y Otros Cuentos de Futbol".

 
EL TEST
 
Desde mi punto de vista no está mal ser villamelón; de hecho, lamento informarle al "Güero" que los villamelones son mayoría y suelen ser los más entusiastas a la hora de gastar, ya sea en boletos, playeras o hasta viajes. Cada uno a la altura de sus posibilidades.


- ¿Cómo saber dónde hay un villamelón? Échenle una leída al siguiente "SancaTest":
 
- Se suben al barco del triunfo; dicen "ganamos" y "perdieron".

- Todo el análisis del resultado se debe a "no le echaron ganas".

- Tienen prejuicios imposibles de borrar y sólo buscan información que les ayude a reafirmarlos; como por ejemplo, todos los futbolistas altos son troncos.

- Creen y repiten como periquitos los clichés y frases sobadas que escuchan en la televisión y de los mismos futbolistas.

- No respetan las opiniones de los demás, ellos son los dueños de la verdad y nada más. Aman llevar la contra.

- Insultan cuando alguien los contradice o algo no les parece.

- Creen que todos los periodistas basan sus opiniones de acuerdo al equipo del que son seguidores.

- Apoyarán al equipo de moda, y lo harán suyo; por ejemplo, "mi Barcelona". Claro, cambiarán dentro de poco cuando el ganador sea otro, y dirán "mi Bayern Munich".

- No creen en el profesionalismo; por ejemplo, si un futbolista jugó en un equipo entonces no puede dirigir al rival porque "no siente la camiseta". Creen que sus acciones las tomarán para perjudicar al club, háganme el favor, como si alguien estuviera peleado con su fuente de ingresos.

- Evitan los partidos de poco interés pero son los primeros en los juegos importantes.

- Proclama ser megafán de un equipo, pero no se sabe los nombres de sus jugadores históricos.

Si conocen a alguien que cumpla cinco o más de los anteriores puntos, me enorgullece compartirles que están ante un villamelón.

No les saquen la vuelta: dentro de todo son divertidos y una parte importante del futbol.

Y a todo esto ¿Sabrá su filosa servilleta de futbol? voy a ser honesto, y como dijo el "Abuelo" Cruz: Yo sólo sé que no he cenado...

¿O cómo era?

 
 
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