Bien entonado
 
 
Para que no digan que se olvida de Guadalajara, Marco Fabián vino de visita.

Como ya no tiene que rendirle cuentas a nadie, pues en su nuevo equipo le dieron luz verde para hacer y deshacer en su día de descanso, se vino a pasar una buena noche al "Mala Noche No" de Avenida Patria.

El domingo por la noche, bueno, más bien lunes porque ya eran las 2:30 de la madrugada, el ahora cementero llegó al lugar muuuy bien acompañado.

Bastaron unos minutos para que una de sus amigas le hiciera olvidar a Ana Bekoa con unos besotes, supongo que para superar el nuevo rompimiento con la actriz (es un decir), digo, porque si aún son novios como que no le va a agradar que alguno de ustedes le vaya con el chisme.

Al principio quiso pasar desapercibido y se escondía, pero conforme fue avanzando la velada ya le valió. Eso sí, no permitió fotos.

Fabián y sus acompañantes andaban bien entonados, y lo digo porque pidieron canciones de banda, que cantaban a todo pulmón, por lo menos seis veces, una y otra vez... y otra... y otra.

Casi a las 5:00 horas, cuando ya empezaban a sacar escobas, lo invitaron a él y a sus acompañantes a terminar la fiesta en otro lado porque tenían que cerrar.

Me imagino que el desgaste ante Veracruz del sábado fue mucho, pues a esas alturas a Fabián se le notaba cansado, como cayéndose y caminando con dificultad.

Eso sí, lo que me quedó claro fue que ya se olvidó de Chivas... porque ahora sólo reconoció el de la etiqueta roja y el del señor que se llama Julio.

 
 
 
 
Como el Barsa
 
 
No digan que yo les dije, pero las cosas no pintan bien entre los 124 socios que alguna vez fueron dueños del Atlas.

Resulta que por motivos que no fueron clarificados, ayer en la Asamblea Extraordinaria les avisó el presidente Eugenio Ruiz Orozco que con la pena pero aparecieron 94 millones de pesos más de deuda.

Es decir, que de los 336 melones que se debían a diferentes acreedores ahora ya son 420, los cuales tienen que restar a los 500 melones que pagó TV Azteca.

Si están nerviosos como aficionados no se preocupen, el trato con TV Azteca ya no se puede caer, pues ellos ya firmaron, pagaron y no tienen vela en el entierro.

La bronca está en ver cómo se reparte la lana entre los socios, y pinta para ponerse feo, al grado de ir a los juzgados.

Por lo pronto, ayer Polo Jiménez, uno de los socios más inconformes, le pidió a Ruiz Orozco que renuncie como Sandro Rosell para que entre un auditor y muestre números.

Bueno, al menos el Atlas tendría algo similar con el Barcelona.

 
 
 
 
Llega Victoria
 
 
La buena es que Atlas esta semana por fin tendrá Victoria.

La mala es que no se trata de un triunfo en la Liga, sino de Edwin Victoria, el nuevo jefe de prensa de los Zorros Aztecas.

Trabajó en el América en la época de Michel Bauer, así que tiene experiencia en el cargo; ojalá traiga las pilas puestas, porque últimamente ha sido un desgarriate ese departamento de comunicación.

 
 
 
 
La Maldición de la Copa
 
 
No, no se trata de una película del nuevo cine mexicano; bueno, ni siquiera sé qué sea el nuevo cine mexicano, aunque siempre he sospechado que es cualquier filme donde salga Martha Higareda mostrando sus de'stas y/o alguno de los Bichir.

¡Nada de eso! "La Maldición de la Copa" ronda entre los entrenadores del futbol tenochca, y si no me creen nomás fíjense.

Memo Vázquez lleva al Cruz Azul a un título... ¡Y sopas! Meses después se lo escabechan.

Ahora fue Carlos Bustos, que apenas hace unas semanas se veía campeón en la Copa ¡Y toma chango tu banana! Ya está engrosando la fila de desempleados.

Les digo, eso de la Copa no deja nada bueno.

 
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