Ya sin la etiqueta de salvavidas, arranca en forma la era Herrera en la Selección.

Los coreanos del sur son el rival, con su característico estilo que encima, presiona, mete la pierna y busca en la velocidad su mejor arma ofensiva. No van a ser un huesito para el Tri, en un juego que se anticipa de muchos roces.

Ahora sí estará a prueba la mesura de carácter que deberá tener Miguel a la hora de revisar las críticas del día siguiente; las fundadas, las hechas sobre la rodilla, las bien y mal intencionadas, todas juntas han provocado desesperación en impotencia en sus antecesores, con mechas más largas que las de Miguel.

Ricardo Peláez jugará un papel fundamental para atemperar al buen Miguel. Está claro que lo más importante está en la cancha. Se trata de buscar en poco tiempo, algo parecido a un estilo de juego que sea adoptado pronto y firme por los jugadores. Se anticipa la búsqueda de una línea de juego agresiva, dinámica y pretendiendo la propiedad de la pelota siempre.

El entusiasmo y afecto por el "Piojo" salvador se transforma desde ya en escrutinio y exigencia en sus formas y resultados. Hoy es el bien amado, como lo fueron Aguirre, Hugo y otros en su momento. Fuera de la cancha tiene un reto distinto que repercute como tsunami dentro de la misma.

Herrera deberá evitar enojarse, gritar y engancharse con el bombardeo al que estará sujeto para explicar todas y cada una de sus decisiones. Si no se enoja, blindará a sus jugadores para dedicarse sólo a lo más importante: la planeación y el trabajo en el campo de juego. Si Miguel cae en la tentación de cederle los micrófonos al lado débil de su temperamento, está comprobado que el jugador sale de concentración y pierde eficacia.

Sobre las expectativas a cuatro meses del Mundial, olvidemos el quinto partido, esperemos solamente que los elegidos y su técnico nos hagan sentir orgullosos por el compromiso y calidad a tope que permite su prestigio. Lo demás es hacer castillos en el aire con tantos imponderables en juego.

Mañana sólo le pido al "Piojo" que cada uno de los que nomine, jueguen con la intensidad de un partido mundialista. Si ha sido capaz de transmitir esa mentalidad, el futbol de calidad y conceptos colectivos vendrán por añadidura y con el tiempo.

Imagínese, ¡se están jugando un lugar para el Mundial! Tendrían que salir con la prisa con la que se aprobaron las reformas. En Las Vegas, México es el gran favorito para quedarse con el segundo lugar del grupo. Eso dicen los apostadores, mejor no les informemos. Un triunfo mañana y en paz hasta el 5 de marzo. Paso a paso.

 
@Javier_Alarcon_
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