El jueves nos encontrábamos realizando nuestra junta de contenidos para el programa radiofónico en el que participo; ahí, se ven los puntos a tratar y los contenidos en audio con los que contamos, se platican las notas o noticias que se han encontrado o los chismes dentro y fuera de la cancha.

Todos los días vemos nuestro contenido de programa y decidimos lo que presentaremos por actualidad o importancia. No quiero dar un curso de producción radiofónica, simplemente dar los antecedentes de la nota que llegó a mis manos de parte del productor y que me dejó anonadado.

La entrevista en vivo con José Luis Real, técnico de las Chivas, no es noticia, pues siempre hay conferencias y no pasa nada. La verdadera nota estaba por llegar, cuando un periodista le pregunta al técnico "¿cómo se encuentra el 'Chapo' Sánchez? Ahí se desató todo.

La nota quizás ya la escucho. El entrenador no tenía ni idea de que a su jugador titular lo habían operado por la mañana. Con cara de "¿qué está pasando?" volteaba con su "asesora" de medios y ponía cara de "no entiendo".

De los momentos más desagradables que he visto pasar a un entrenador en mi vida.

La nota no se queda ahí. Hay muchas cosas qué saber e investigar, y para eso nacieron los mejores reporteros. Su servidor no merece ese título periodístico, sólo podré comentar esta situación.

Antes, quiero saludar con gusto al jugador. Sé que está bien, que a la postre, es lo que vale la pena. Cada vez que me preguntan "¿qué le pasa a Chivas?" deberé de contestar con más contenido y estas cosas nutren mis respuestas cada día.

En Chivas no hay orden ni respeto. Las cosas se hacen sin procedimientos, sin regulaciones, sin ordenamientos. Se hacen, simplemente, por sus pantalones.

¿Quién cree usted que debería ser el primero en conocer la decisión de operar a un jugador? El técnico, por supuesto.

Hay un cuerpo médico que se hará cargo de realizar la valoración y dar un reporte de la lesión, al técnico. Habrá otro parte que deberá informar al director deportivo y éste, a su vez, con la anuencia y conocimiento del técnico, verán el momento y el lugar apropiado para informarlo.

Lo penoso y humillante para un técnico es que sea el último en saberlo. Lo sabía el doctor, lo sabían los reporteros, lo sabía el público a través de las redes sociales. El único que no lo sabía era quien debería saberlo primero.

Estas son las cosas que debo recordar cuando quiero dar una correcta explicación de lo que pasa en Chivas. Nunca se olvidan, ni aunque tengas una concha del tamaño del mundo.

Quizás, con la idea de continuar, se podrá minimizar lo sucedido, pero olvidar y perdonar, jamás. El "caso Michel", tampoco. Y así sucesivamente se llenarán de capítulos sin resolver y de personas "maltratadas" que en su momento se las cobrarán.

Ya no es lo mismo jugar en Chivas, ya no se llega con tanto gusto e interés, ya no se llenan los estadios, ya no se ven tantos niños con sus playeras en la calle, ya no se ganan torneos, ya no son la base de la Selección Mayor.

No hay peor cosa para un gran amor... que una gran decepción. Espero sus comentarios.

 
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