Islandia, Jordania y Nueva Zelanda son los más débiles que juegan el Repechaje, pero de los tres el primero es el único que mantiene sus esperanzas vivas.
Aunque no ganó jugando en casa, el 0-0 con Croacia le da la oportunidad de complicar al rival con un gol de visita. El partido que se jugó ayer en el pequeño estadio de la capital de este país de 300 mil habitantes, fue de un constante dominio croata, mucho más a partir de la expulsión de Olafur Skulason a los 50 minutos. Liderados por el madridista Luka Modric los visitantes tuvieron la posesión, tiraron al arco 14 veces contra 4 del local, e hicieron del portero local la figura del partido.
Su jugador más internacional es Eidur Gudjohnsen (que ayer jugó sólo la segunda parte) quien llegó al Barcelona de Guardiola para alternar en algunos partidos y salir por la puerta de atrás. En 1996, protagonizó un hecho insólito: en un encuentro contra Estonia sustituyó ¡a su padre!
Durante la fase previa al Repechaje los islandeses quedaron a siete puntos de Suiza y aventajaron por dos a Eslovenia. Ganaron cinco, perdieron tres y empataron dos, logrando 17 goles y encajando 15.
México ha enfrentado en 2003 y 2010 a esta Selección y fueron sendos empates en blanco.
El futbol de la isla hasta ahora registra como mayor logro histórico una victoria 2-0 contra Italia en un amistoso en 2004 con récord de asistencia: 20 mil espectadores.
Pero la hazaña de Iceland (Tierra de Hielo), el nombre en inglés de este territorio, es haber conseguido el bienestar con números de país desarrollado: 99% de alfabetización, 7.8 del PIB dedicado a la educación y 81 años de expectativa de vida y crecer su economía un ritmo tres veces superior a la media europea tras su sonada bancarrota en 2008 cuando la Bolsa cayó 90 por ciento y el PIB 7 puntos. Los bancos se derrumbaron, no hubo ningún Fobaproa que los rescatara y algunos banqueros fueron a la cárcel. Cayó el gobierno en 2009 y el entonces primer ministro Geir Haarde ha sido juzgado por negligencia y por llevar al país al abismo.
A ese gobierno le sucedió el de Johanna Sigurdaedottir, una mujer que puso en aprietos a la diplomacia china cuando viajó a ese país acompañada de su esposa. En el país asiático la homosexualidad es todo un tabú (se dejó de considerar delito en 1997 y enfermedad mental en 2003). Ahora volvió la centroderecha al poder y hasta el Partido Pirata logró representación en el Parlamento.
¿Y quién no recuerda a Björk? Ella es fruto del especial acento que se da a la música en la educación islandesa. De hecho más de 70 bandas han tocado este año fuera del país y el ingreso por actividades culturales (mil millones de euros) es el segundo después de la pesca del bacalao y dobla al de la agricultura.
Aunque difícil, de lograr superar el escollo de Croacia, Islandia podría ahora apuntarse la otra hazaña: la de ser el país más pequeño en clasificarse a un Mundial.
homero.fernandez@reforma.com
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