De los primeros partidos de Liguilla, posiblemente el América-Toluca ha sido el más emocionante, con un primer tiempo muy bueno, con 2 equipos combativos, buscando el primer gol; América lo encontró muy rápido, Toluca reaccionó, América volvió a anotar a base de sus hombres altos en la defensa, pero el segundo tiempo bajó el nivel.

América empezó a ensuciar el partido, luego Marchesín es increíble la cantidad de tiempo que hace para despejar, cuando viene una pelota se tira, se va al suelo, por lo menos le quita 4, 5 minutos al partido y los árbitros no le dicen nada, ni le sacan la tarjeta.

Y como el América en el segundo tiempo no quiso saber nada y se echó para atrás, Toluca empezó a tomar el mando, se fue encima, fue llegando por las bandas, con centros.

Finalmente hizo Vega una gran jugada, se quitó a 3 y se perfiló perfecto para disparar al poste contrario de Marchesín, empatar en el último minuto de tiempo agregado, y por supuesto vinieron las reclamaciones americanistas, de Marchesín que cínicamente se rió delante del árbitro diciendo que había dado demasiado tiempo.

Pagó caro América, muy caro, el asunto de jugar tan atrás en el segundo tiempo, y Toluca lo fue metiendo, metiendo hasta que consigue un gran gol, uno de los mejores goles junto con el de Funes Mori, el del chico Vega, su bella jugada, pues con una finta se quita a 3 jugadores y marca con un disparo bien colocado.

¿Merecido? Sí ¿Está vivo el Toluca? Sí ¿Está vivo el América? También. Pero que lo tome como lección el equipo del "Piojo" Herrera, porque no puede meter un gol y echarse atrás; y hacer tiempo y tiempo, porque un equipo se le va encima y ahora Toluca tendrá que salir a sacar la victoria en el Azteca. Está vivo, mucho más vivo que el partido de Cruz Azul vs. Querétaro, e igual de vivo que el de Monterrey contra el equipo de Santos. Eso es en cuanto a la Liguilla.

El otro, el escándalo argentino, que le dio la vuelta al mundo, River y Boca, por primera vez en una Final, juegan el primer partido, empatan a 2 goles, emotivo.

Y en el segundo, una bola de salvajes, apedrean el autobús de Boca y no se puede jugar.

Y como estaba metido Infantino, en el juego, la FIFA, a través de la UEFA, pide dónde jugarse en un lugar lejano de Argentina para que los hinchas no puedan acudir. Finalmente UEFA ofrece y el Madrid, el Santiago Bernabéu, que casi nunca presta su estadio, y dice bueno, que vengan a jugar el partido de la Final de la Copa Libertadores.

Va a ser raro ver un River-Boca en el Bernabéu. Madrid, bueno todo España, tendrá 200 argentinos cuando mucho, que irán al partido para ver la Final de Libertadores. Es curioso que una Final de Libertadores termine en un estadio que ha albergado Champions, ahora tenga que ser utilizado por jugadores de River-Boca que se la van a jugar el todo por el todo, en esta Libertadores que ha sido un escándalo muy sucio para el futbol argentino, para el futbol de Conmebol y para todo lo que rodea a la AFA, que es un desastre y que todo mundo lo sabe, un auténtico nido de ladrones.

 
 
Twitter: @joserra_espn