El silbatazo final del cardiaco partido entre Costa Rica y México no fue sólo el inicio de un gran y anunciado fracaso futbolístico de nuestra Selección, también abrió la temporada de "Caza al culpable".

El "Chicharito", quien hace apenas un año era considerado la solución para el ataque tricolor, hoy es uno de los más señalados por los aficionados y muchos periodistas.

Si esos críticos de bar, clubes y escritorios dejaran de ver el futbol con el corazón, lograrían percibir que Javier Hernández es un jugador bastante limitado técnicamente, y sumamente dependiente de un buen juego colectivo.

No se puede esperar más del "Chicharito", él es un cazagoles que sin compañeros que generen buen juego ofensivo difícilmente destacará.

Ya en el caso de Giovani, Aquino y otros cuantos, poniéndome en la posición de abogado del diablo, no encuentro argumentos para defenderlos, ya que ellos eran los encargados de generar este envolvente futbol ofensivo que tanta falta nos ha hecho.

Pero si dejamos de buscar insistentemente defectos en la flecha y dirigiéramos más nuestra atención a los indios, creo que estaríamos más cerca de entender y encontrar una real solución.

El mayor depredador y a la vez gran responsable de este retroceso en el futbol mexicano es el presidente de laFMF, Justino Compeán, y sus cómplices, que van desde promotores que imponen jugadores y distribuyen y ganan lana, hasta los dueños de los equipos, quienes se satisfacen con los números negros en sus cuentas y aceptan pasivamente los errores de sus empleados.

Después de todo el martirio que hemos vivido sigue Justino de pie, imponiendo y dirigiendo una orquesta que suena horriblemente desafinada.

Compeán, el que más domina el juego "Caza al culpable", ya encontró el suyo, de hecho el segundo en un mes, y ése es el recién llegado Víctor Manuel Vucetich.

Dos partidos para el buen "Vuce" y Compeán ya cambió otro técnico en su era. Ya tuvo al "Chepo" , a Tena, a Vucetich y ahora al "Piojo" Herrera.

En lo personal, creo que mover algunas flechas, frutos de la publicidad, es necesario, pero si queremos mejores resultados debemos dejar de tomar pastillas para el dolor y tratar el mal desde la raíz, que se llama Justino Compeán y compañía.

 
 
Caras opuestas
 
Monterrey se juega su vida en Torreón y creo que regresará eliminado, mientras que Tigres tiene en sus manos una oportunidad inmejorable, al medirse al Atlante, pero tiene que mejorar su forma de jugar o tendrá el mismo destino que su vecino.

 
 
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