Le quita la playera literalmente
 
Si creían que todos, tooooodos los Pumas estaban felices con el armado de la defensa tras la llegada del central español Alejandro Arribas y el regreso del lateral Luis Fuentes tras su paso por Rayados, pues les cuento que no...

Y es que por más que les urgía que Fuentes reportara para que (al fin) Jesús Gallardo jugara en su posición de volante ofensivo y que Arribas demostrara su liderazgo ante la salida del uruguayo Gerardo Alcoba, no a todos los futbolistas auriazules les viene bien la llegada de estos dos al conjunto universitario.

Uno de ellos es el canterano José Antonio García, que a mí me late que está dando las últimas que le quedan en el cuadro del Pedregal, a tal grado que hizo muuuucho ruido cuando Guillermo Vázquez fue presentado como técnico de los Tiburones Rojos del Veracruz y dijeron que el Puerto Jarocho sería destino para él y para Josecarlos van Rankin, otro que dio tumbos en 2017.

Este muchacho de 25 años ha tenido chance de jugar por toda la zaga y, aunque en la última temporada se desenvolvió en la central, al parecer se vio rebasado por Pablo Jáquez y Rodrigo González.

Pero el colmo le ha de haber llegado en el duelo entre Pumas y Alebrijes en el que Luis Fuentes, con sólo un día de entrenamiento al mando de David Patiño, fue titular y ademáaas usó su playera, sí, la número 18 y con el "J. García" en la espalda, como un preludio de lo que le espera al pobre de Toño la próxima campaña.

 
 
Águila camaleónica
 
Déjenme platicarles que en la Liga MX Femenil está por concretarse una de las primeras "grandes traiciones", aunque esta se va a dar más por necesidad que por desamor...

Resuuuulta que hay una chiquilla que no entró en planes de Leonardo Cuéllar, estratega del América y que tuvo que buscar una oportunidad en otro lado para poder continuar con su carrera, y ¿adivinen dónde a fue? Sip, a la Cantera de Pumas...

La manzana de la discordia a la que me refiero es Alexandra Martínez, quien luego de jugar 9 jornadas bajo las órdenes del ex entrenador del Tri Femenil, poco a poco fue relegada a la banca a tal grado de que pasó de ser la contención titular a una irregular lateral del Ame, por lo que ante ese panorama, la chiapaneca decidió probar suerte en las visorias que hizo el conjunto universitario previo al Clausura 2018 y le llenó el ojo rápido, muuuy rápido, a la entrenadora auriazul Ileana Dávila.

A ver cómo reciben los aficionados del América a la futbolista cuando la vean vestida de puma, aunque eso sí, yo dudo que le importe mucho, pues diiiicen que ahora está en un ambiente más chido que el que se percibía en Coapa.

 
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