"Los dólares no son tan importantes, ya que los tienes".

Johnny Miller, Profesional de Golf
 
 
El año ha cerrado tan rápido como la velocidad con la que va una bola pegada por un profesional de hoy: en un abrir y cerrar de ojos estamos por iniciar 2018, espero mi foursome de lectores haya logrado bajar el handicap este año y siga mejorando el próximo.

El mundo del golf tuvo un gran año. En el país vecino del norte, la curva de actividad de golfistas y apertura de campos nuevos se ha inclinado al lado correcto; empieza de nuevo el crecimiento de rondas jugadas y la industria, a ver sus beneficios.

Sin duda, sus principales detonantes son un sector inmobiliario más estable, los campos nuevos se hacen con mayor conciencia de costos de construcción y mantenimiento (sustentables), y la influencia del golf competitivo ha despuntado con la consolidación de una nueva generación de golfistas muy buenos, carismáticos y que están muy cerca de la afición a través de redes sociales.

Dustin Johnson, Jordan Speith, Justin Thomas, Rickie Fowler y Jon Rahm son la inyección de buen golf y alegría que necesita ver el aficionado.

En México vamos tan bien o mejor porque la afición continua creciendo. Los campos de golf de aquí y de allá reportan crecimiento importante, por ejemplo: El Cielo Country Club, en Guadalajara, ha pasado de albergar 7 mil rondas por año hace cinco a tener más 29 mil para el cierre de éste.

Zibatá Golf, en Querétaro (campo abierto al publico), reporta 10 mil, 14 mil, y 17 mil en sus tres primeros años de operación. La razón principal es esa apertura de los campos tipo country club a llenar sus vacíos con golfistas que pagan un green fee, pero no quieren compromisos del pago de membresía.

La influencia de los mexicanos de competencia empieza a tener efecto sobre le golf social, ahora se reconoce lo hecho por los profesionales en el extranjero; poco he dicho del gran mérito de Gaby López al lograr retener la tarjeta en la LPGA, el segundo año en esos niveles es el más difícil, así que lo mejor de ella empezará a partir de la siguiente temporada.

La llegada de los 60 mejores profesionales al World Championship a la Ciudad de México fue y será para los próximos seis años otro de los motores de crecimiento por ser un proyecto que va de la mano a compromisos a favor de la industria.

Y como punto final está el buen desempeño que lleva la enseñanza del golf en la base. Muchos clubes en México han logrado establecer un buen servicio de enseñanza para sus infantiles y juveniles a través de la capacitación y preparación de instructores. Empiezan a florecer instructores capaces de impulsar jugadores con juego suficientemente bueno para competir entre los mejores escenarios en el extranjero y ser reclutados a los programas colegiales de los Estados Unidos.

Bueno, vamos a cerrar el año jugando un par de campos muy recomendables: Altozano, Colima, y el Tamarindo, ¿quién se apunta?

Hasta el próximo green.

 
 
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