El resucitador
 
Si algo debe reconocérsele a Miguel Herrera es su gran capacidad para resucitar a los muer... Perdón, a los jugadores que ya simplemente deambulaban por Coapa, como pasó en su primera etapa con Miguel Layún y ahora con Darwin Quintero.

El colombiano se ha convertido en uno de los jugadores más determinantes de las Águilas, al grado de que es clave en la serie contra Cruz Azul y en general en esta Liguilla, en que los azulcremas buscan separarse de las Chivas en títulos.

Dicen que en la pretemporada, Darwin estuvo a nada de salir del América, pero tras pedir una oportunidad, simple y sencillamente demostró que le sobraba actitud para defender la playera azulcrema, la cual había vestido sin mucho eco hasta ese momento.

Y es que el colombiano no la tenía nada fácil para justificar los casi 15 millones de dólares que costó su fichaje, la mayor parte "cash" y otra en especie, ya que a cambio de él se fueron a Santos Laguna los jugadores Jesús Molina y Luis Ángel Mendoza.

Tal parece que verse en el limbo hizo despertar a Darwin, quien redobló esfuerzos y hasta ahora ha justificado la confianza del "Piojo", aunque en Coapa aún esperan que realmente desquite la lanota que se pagó por él.

 
 
Se lleva la de'Sambu'
 
Al que le fue de maravilla la noche del miércoles en el Nemesio Diez fue al luchador mexicano Alberto "El Patrón".

El gladiador asistió al cotejo entre Toluca y Monarcas, y no sólo vio el triunfo de sus Diablos Rojos, sino que hasta premio se llevó.

El ex integrante de la WWE no cabía de la alegría tras el partido, porque además de disfrutar de un pequeño reconocimiento al medio tiempo, cuando incluso La Banda del Rojo le cantó "Olé, olé, olé, Patrón, Patrón"; se llevó un auténtico trofeo a casa.

Y es que el mediocampista Rubens Sambueza, uno de los mejores escarlatas en la cancha, le regaló su playera, la que Alberto no soltaba ni siquiera cuando, al final del duelo, más de un curioso lo reconoció y le pidió una foto.

Luego del trago amargo de la cancelación de la función que iba a dar en el Teatro Molière el martes pasado en beneficio de los niños damnificados, "El Patrón" salió feliz e inspirado del mismísimo Infierno.

 
 
¿Descanso? Sí, claro...

Si a ustedes les sorprendieron las declaraciones que dio Paco Jémez, en las que primero dijo que se tomaría seis meses de vacaciones por los desgastantes pleitos con la prensa, y luego dejó en el aire su permanencia en Cruz Azul, a mí la neta es que no...

Algo me dice que el técnico de La Máquina ya está soltando esos viejos pretextos en los que se dice "ya estoy muy cansado" y "quiero tiempo con mi familia", para presionar a su directiva o luego aparecer bien sonriente en otro equipo.

Habrá que ver si Jémez puede dejar una herencia mejor que la de haber acabado con la sequía de seis torneos de los celestes sin Liguilla, aunque ya con eso muchos le están dando "Las Palmas".

 
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