¿Salió librada la honorabilidad del futbol?

La revista The Economist y los periódicos The Guardian y The New York Times han acuñado un termino: "Mundo de la post-verdad". Dicen que la información esta fuera de control y el futbol no está exento.

La culpa, dicen, es de Google, Facebook y Twitter, sin importar que buena parte de la población ni siquiera los usa.

En su blog, Ignazio Aiestaran afirma con sarcasmo que "los debates profundos son en 140 caracteres, porque Twitter está diseñado para repetir lo más estruendoso del día y odiar desde el anonimato". ¿Quién lo dijo? ¿Quién lo publicó? No importa, porque también genera negocio.

Nos acostumbramos a que mítines, catástrofes, atentados y cualquier evento masivo, como la ultima jornada rumbo al Mundial de Rusia, sean plato de televisión, donde el show debe continuar.

Y como está de moda disfrazar emociones y creencias personales con notas, ahí les va: Ecuador se regaló ante Argentina con suplentes, muchos menores de 25 años. La tempranera anotación sólo revistió la planeada resurrección al tercer día, perdón, el triplete del "maestro" Lionel Messi quien, junto a Cristiano Ronaldo, llenará con cientos de millones de dólares las arcas de los organizadores rusos, casi todos ex agentes de la KGB.

Panamá clasificó con un gol fantasma y una borlotera que interrumpió el juego. En Honduras, los balones salían del banco como bolos en bautizo. Hubo un gol en fuera de lugar y tres payasos escondieron sus gafetes e interrumpieron el juego.

Y así la venganza se consumó contra Estados Unidos por las acciones del FBI contra los miembros de la FIFA acusados de lavado y sobornos.

No se ría, muchos están convencidos de esto. Cuidado con juicios falsos o infundados que, publicados, se suman al discurso público. La trampa está en confirmar con mentiras los prejuicios.

PD. "Como todos los soñadores, confundí el desencanto con la verdad". Jean Paul Sartre.

Lo escrito, escrito está.

 
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