Luego de que en la Semana 1 solamente tres partidos se definieron por seis puntos o menos, la Semana 2 arrancó con un partido deslucido pero apretado hasta el final, en el que Houston ganó 13-9 a Cincinnati.

Y al menos en el papel, dicha tendencia podría mantenerse para la jornada de hoy, en la que destacan duelos en donde se verán las caras rivales con cuentas pendientes, ya sea del pasado lejano o de fechas recientes.

Los Empacadores regresan a Atlanta, en donde fueron humillados hace apenas unos meses en el Campeonato de la Conferencia Nacional.

Los Halcones estarán estrenando estadio y querrán iniciar con el pie derecho su historia en este espectacular escenario.

Sin embargo, la ofensiva, que parece haber extrañado la presencia de Kyle Shanahan, tendrá que elevar su nivel, ya que los 23 puntos que anotaron a Chicago podrían no ser suficientes contra Aaron Rodgers y compañía.

Green Bay viene de una actuación sólida y convincente para derrotar a Seattle.

La ofensiva siempre será peligrosa con Rodgers en los controles, y la defensa que parece ser una unidad mucho más sólida que en años anteriores, enfrentará una dura prueba frente a la larga lista de armas letales que tiene Matt Ryan a su disposición.

Los Acereros y los Vikingos se verán las caras tal y como lo hicieron hace casi 43 años en Súper Tazón IX.

A diferencia de la inolvidable Cortina de Acero, actualmente la defensa de Pittsburgh es una unidad impredecible.

Aunque cuenta con jugadores de calidad y el debut de T.J. Watt ha sido espectacular, la vulnerabilidad de la secundaria puede llegar a ser alarmante.

La ofensiva salió adelante gracias a otra jornada notable de Antonio Brown, pero necesitará ser mucho más consistente para hacerle daño a Minnesota.

Los Vikingos no solo vencieron a los Santos, sino que se mostraron capaces de nulificar a una ofensiva comandada por Drew Brees, tarea nada sencilla.

Mientras tanto, Sam Bradford tuvo una jornada brillante y parece seguir mejorando, entre otras cosas gracias a la presencia de jugadores peligrosos y explosivos como Stefon Diggs, Dalvin Cook y Kyle Rudolph.

En otro duelo que nos llena de nostalgia por el recuerdo del Súper Tazón XII, Broncos y Vaqueros se habrán de ver las caras buscando mantenerse invictos.

Más allá del cuestionable nivel de Gigantes, Dallas lució como un equipo sólido, serio y muy bien entrenado.

La línea ofensiva sigue siendo de las mejores de la Liga, mientras que Bryant, Beasley, Witten y Elliot son todos jugadores de élite, lo cual facilita el trabajo para Dak Prescott.

Además, la defensa funcionó sorprendentemente bien a pesar de que está llena de nuevas incorporaciones en el perímetro.

La poderosa defensiva de Denver tendrá que mejorar notablemente tras haber sufrido para cerrar el partido ante Cargadores, aunque la actuación de Trevor Siemian, ante una unidad tan agresiva como la de San Diego, es un motivo de optimismo para la escuadra del debutante Vance Joseph.

 
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