Sin razón o con razón, bajo la crítica y la polémica, hoy los árbitros ponen el ejemplo a los futbolistas y se van a la huelga. Los rumores mencionaban la posibilidad de esta medida durante la semana, pero muy pocos lo tomaron en serio y tras el anuncio de Eugenio Rivas, presidente de la Comisión Disciplinaria, sobre los castigos para 4 futbolistas (Enrique Triverio, Rubens Sambueza, Pablo Aguilar y Andrés Andrade) y un presidente (Ricardo Peláez), involucrados en conflictos con 2 árbitros (Fernando Hernández y Miguel Ángel Flores), de inmediato el designado para el juego en Veracruz, Luis Enrique Santander y sus auxiliares, anunciaron que no pitarían el encuentro inaugural de la Fecha 10.

Dignidad o capricho, pero al menos hasta el momento que escribo esto, la medida es un claro mensaje de unidad que muy pocos gremios dentro del futbol mexicano pueden presumir.

En noviembre de 2014 se dio un movimiento arbitral en el Centro de Capacitación que aparentemente fue resuelto con prontitud por Justino Compeán (presidente de la FMF) y Rafael Mancilla (presidente de la Comisión de Arbitraje). Dentro de sus inquietudes ventilaron la idea de crear una Asociación Nacional de Árbitros independiente de la FMF, misma que hoy existe bajo el nombre de Asociación Mexicana de Árbitros (AMA) y que tiene en Roberto García Orozco a su Presidente. Justamente la AMA fue quien dio a conocer el viernes que los silbantes no se presentarían en la Fecha 10 y en su cuenta de Twitter agregó: "..luchando por el respeto dentro del terreno de juego".

Al momento de escuchar las sanciones dadas a conocer por Eugenio Rivas me encontraba en compañía de varios compañeros de trabajo en Univision Deportes. A todos nos parecieron sensatos los castigos e incluso la absolución para Andrade, aunque también consideramos que deberían actuar de oficio y no esperar las protestas de los clubes, para acciones como las que se dieron en el juego Xolos vs. Pachuca y que, por convenir a sus intereses, ninguno de los clubes protestó las jugadas sumamente violentas de Jara y Orozco.

"Te felicito y a la vez te desfelicito", me decía un técnico bastante coloquial, algo que aplicaría para este inédito movimiento arbitral mexicano: "te felicito" por la determinación, valor, cumplimiento de amenaza y unidad en un momento de altísima tensión... pero "te desfelicito" por el cada vez más bajo nivel de tus árbitros, por la falta de silbantes de renombre mundial, por las bajas evaluaciones en pruebas físicas de algunos y la ausencia total de autocrítica.

Pese a la gran cantidad de oportunidades (mucho más que los árbitros) que hemos tenido por generaciones recientes los futbolistas, no hemos sido capaces de realizar un paro como el que han hecho los árbitros. Al momento es imposible saber cómo terminará esta revuelta y quienes serán los damnificados, pero es innegable que se ha establecido un precedente y que el sector menos esperado ha puesto la muestra con sus demandas e indignación por lo que consideran una falta de respeto.

 
Twitter: @Felixatlante12