Según la FIFA, "The Best" en el 2016 fue Cristiano Ronaldo.

Junto con el Balón de Oro, el más importante de los reconocimientos que puede recibir un futbolista, el extraordinario jugador portugués del Real Madrid se ha llevado cuanto premio se ha dado para lo más destacado del año pasado en el ámbito balompédico.

Pero se llevó u obtuvo principalmente, junto con sus respectivos compañeros, los títulos de la Champions League y de la Eurocopa.

Esos incomparables logros colectivos sirven para alimentar, desde la perspectiva de quienes son incapaces de aquilatar el futbol que se juega por el futbol mismo, la otra increíble comparación entre el astro merengue y Lionel Messi.

¿De verdad puede confundirse a tal grado lo que se gana en equipo con lo que se juega en lo individual, como para "deducir" que Cristiano es mejor que Messi, evidentemente ubicado en otra categoría?

Así parece, y a quienes de veras creen ver a los dos grandes futbolistas en el mismo nivel no hay forma de explicarles la clara distancia que los separa.

Cristiano, con sus enormes logros aprovechados para alimentar la falsa polémica de la actualidad.

Messi, a la espera del final de su carrera, y de más tiempo, para saber qué lugar termina ocupando entre los más grandes exponentes en la historia de este juego: Di Stefano, Pelé, Cruyff y Maradona, mencionados no en orden de importancia sino de aparición.

Como muchos no distinguen la evidente diferencia entre lo que cada jugador hace y ha hecho con cada balón que toca y ha tocado, la comparación continúa... porque además vende.

Cosas de la mercadotecnia del futbol moderno y de la incapacidad para apreciar y distinguir, sin camiseta puesta, el rendimiento de cada jugador.

Y usted, estimado lector... ¿quién cree que es mejor?

 
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