La derrota de Minnesota ante Filadelfia y la caída de Atlanta contra San Diego son tan sólo los capítulos más recientes, en una serie de resultados, que hacen complicado señalar a las escuadras con aspiraciones reales de pelear por representar a la Conferencia Nacional en el Súper Tazón.
Los Vikingos venían de una semana de descanso y lucían imparables, mientras que las Águilas habían
ligado un par de descalabros y aun jugando en casa, no parecían tener opciones frente a la escuadra dirigida por Mike Zimmer.
Lo cierto es que Filadelfia jugó mucho mejor que Minnesota y ganó con holgura, con lo que el equipo de Doug Pederson retoma el vuelo y vuelve a soñar con pelear por el título en la División Este, mientras que los Vikingos tendrán que reponerse pronto del golpe psicológico que significa haber perdido el invicto.
En Atlanta, los Halcones cayeron ante San Diego y perdieron por escaso margen por segunda semana consecutiva. Y aunque la ofensiva es capaz de anotar muchos puntos y hacerlo en cuestión de segundos, la defensa ha vuelto a mostrar su vulnerabilidad al perder una ventaja que parecía definitiva.
Perder frente a Seattle de visita gracias a una equivocación de los oficiales es muy distinto a caer en casa contra los Cargadores tras haber tenido 17 puntos de ventaja.
Y así como Minnesota y Atlanta sufrieron derrotas inesperadas que nos hacen dudar de sus verdaderos alcances, en semanas recientes habíamos sido testigos de actuaciones decepcionantes de equipos que parecieran tener los tamaños para considerarlos como contendientes.
Fue así que vimos a Green Bay perder contra Dallas en la Semana 6; a los Vaqueros perder frente a los Gigantes en su presentación o a Arizona caer ante Búfalo y Carneros en semanas consecutivas. Lo cierto es que cuando estamos a punto de llegar a la mitad del calendario, no hay un solo equipo con la constancia y la consistencia necesarias para ser señalado como favorito para terminar la temporada regular con la mejor marca en el sector.
Los Vaqueros descansaron y es gracias a ese detalle que hoy parecen ser el rival a vencer. Sin embargo, por lo visto ayer en Filadelfia y tomando en cuenta la falta de regularidad de todos los "pesos completos" en la Conferencia Nacional, no sería raro que las Águilas les dieran un susto el próximo domingo y reajusten las expectativas de los expertos de cara a la segunda parte de la temporada regular.
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