"Cuando estás ejecutando un golpe, cualquier pensamiento negativo es veneno puro".
Harvey Penick, instructor de golf
Todas las diferentes actividades que desempeño profesionalmente tienen algo que ver con el golf.
Viajo para ver diferentes temas en clubes del País y es notorio que ya inició el ciclo escolar porque las academias o escuelas del golf de estos
lugares están en plena actividad de enseñanza.
En los clubes, con visión de hacer crecer el deporte, las áreas de práctica están llenas de infantiles-juveniles.
Niños y niñas novatos, y hasta experimentados, han iniciado otro ciclo de aprendizaje o preparación para las competencias. Es una realidad que algunos clubes buscan crecer para su propio beneficio en una futura membresía e incrementar el gusto por jugar golf, y la base está en esa enseñanza.
En las primeras experiencias de jugar golf, todos los niños y niñas llegan por curiosidad, por empuje de los papás a hacer un deporte, y algunos porque les gusta el tipo de competencia que se podría generar al ser un deporte individual.
Lo importante para permanecer es engancharse con el reto natural, vivir el sano ambiente social y para los que son seducidos por la competencia poder medir la mejoría del esfuerzo del entrenamiento y los scores con un handicap.
La realidad es que el área de enseñanza y las competencias juveniles del País usan poco o nada del Sistema de Handicap como medio de desarrollo y sus beneficios.
Las competencias organizadas emplean la edad haciendo una división de dos años entre cada categoría, excepto la mayor. Usar el estímulo externo para el desarrollo, como son las competencias, no es la forma ideal, ya que el jugador debe poder medir el avance propio (estímulo interno) en la época de aprendizaje.
En los países de Europa, a diferencia de América, los juveniles tienen un handicap desde temprana edad y aprenden que bajarlo es la señal de mejoría, independientemente de lo que haga en competencia.
El Sistema de Handicap debería ser utilizado en México en las competencias de las Giras Regionales reconociendo el score gross y neto para estimular aún más a los jugadores que inician y que todavía no son tan habilidosos o dedicados, que son los menos.
Es común ver que las categorías por edad son dominadas por dos o tres niños. La mayoría no tiene muchas posibilidades de ganar porque ven lejos la diferencia contra los primeros lugares de tal forma que pierden el interés.
No hay mejor enseñanza que la premisa bajo la cual opera el Sistema de Handicap y dice: "Todo jugador intentará hacer su mejor score en cada vuelta de cualquier campo que juegue y entregará todas las tarjetas de puntuación aceptables para ser procesadas".
Hasta el próximo green.
rafaelalarcongolf@gmail.com
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